Por Marisol López
La implementación de programas de responsabilidad social empresarial (RSE) ha alentado a muchas compañías a involucrar a sus colaboradores en actividades de voluntariado.
Estas actividades no solo crean conciencia humanitaria dentro del equipo, sino que a su vez se convierten en una de las estrategias de las empresas para fortalecer la cultura de RSE al interior.
Como parte de su estrategia de RS, el director de Responsabilidad Social de Restaurantes Toks, Gustavo Pérez Berlanga, ha invitado a sus empleados a cooperar en algunos de sus proyectos productivos. Un ejemplo claro fue la participación de los colaboradores con las mujeres del proyecto navideño de Toks y CEMEX, elaborando esferas artesanales, que benefició a 536 mujeres de 14 comunidades.
Desde hace seis años la cadena restaurantera lleva a cabo Jueguetoks. Este año, la iniciativa involucró a más de 150 niños de la Fundación Aquí Nadie Se Rinde (ANSeR), 150 padres de familia y a 200 colaboradores de la empresa.
El reto de Juguetoks comenzó en las instalaciones de Fundación ANSER, una asociación sin fines de lucro que se encarga del tratamiento de niños y niñas con cáncer. Fue ahí donde los niños elaboraron una carta dirigida a los Reyes Magos.
En diciembre pasado, los colaboradores del Centro de Apoyo en Comisariato de Toks fueron convocados a participar en una dinámica para elegir las cartas de los niños por medio de una actividad que consistía en romper globos que llevaban al interior las cartas.
En el festejo de Juguetoks, los niños se involucraron en actividades que potenciaron su creatividad, educación, ilusión, respeto y amistad; a su vez los padrinos y los padres de familia reflejaron los mismos valores.
Mientras los niños y niñas participaban en el concurso de Iron Chef Mini, realizando una galleta con su figura favorita, los padres de familia disfrutaron un curso básico de primeros auxilios, donde demostraron su capacidad de urgencia en una situación de peligro, dando un valor agregado a su vida diaria.
Por otro lado, Capitán peligro fue el encargado de dibujar sonrisas a los pequeños, mostrando a un gran equipo de voluntarios. Oficiales de tránsito realizaron un acto de clown para los niños enseñando a chicos y grandes temas de seguridad y educación vial. Finalmente, padrinos de los niños acompañaron a cada uno de ellos a la entrega de su juguete.
De esta manera los 200 colaboradores fortalecen el compromiso social y la cultura de RSE dentro de su empresa, logrando como resultado miles de sonrisas. La cadena restaurante integra de manera puntual a cada uno de sus colaboradores a la parte de RSE y al hacerlo permanecen firmes los programas responsables de la empresa.