Noventa y cinco por ciento de los niños de primaria en México no sabe lo que significa la biodiversidad ni la importancia que tiene, a pesar de encontrarnos en uno de los cinco países más biodiversos del planeta, con casi 10% de las especies registradas en el mundo.
“Para poder conservar hay que conocer, no se puede proteger lo desconocido”, considera Luis Manuel Guerra, investigador y comunicador de temas medioambientales desde hace más de 30 años.
Mejor conocido como “El Químico” Guerra, considera que la información ambiental en los primeros años de educacion básica es fundamental para formar ciudadanos participativos, incentivar la participación de la población en esfuerzos de conservacion ambiental y apoyar las políticas públicas de cuidado del planeta.
Alcanzar una sociedad que deje de consumir productos que dañan el medio ambiente de manera irreversible –como artículos de piel de animales en peligro de extinción o amenazados, huevos de tortuga, madera que no provenga de bosques sustentables, pinos de navidad de bosques sin manejo sustentable– inicia con una constante educación ambiental desde temprana edad.
La educación ambiental es esencial para alcanzar el cumplimiento del Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) número 4, educación de calidad, establecido dentro de las 17 metas de la Agenda 2030 de Naciones Unidas y sus países miembro, incluido México.
Oportunidad para la empresa
Dentro de su visión y misión, las empresas deben incorporar el desarrollo sustentable como parte esencial de su negocio. Empresa que no sea sustentable para mediados de este siglo, ya no será negocio, considera el especialista ambiental.
“Los empresarios deben considerar en el mismo rango de prioridad el cumplir con sus obligaciones fiscales y pago de impuestos que adoptar medidas que reduzcan su impacto ambiental”, añade.
Este compromiso puede realizarse a través de programas que mitiguen la huella ecológica de la operación del negocio, medidas de protección del medio ambiente, inversión en equipo ecoeficiente o educación y sensibilización ambiental tanto al interior de la organización, con sus colaboradores, como al exterior, en sus comunidades de influencia.
Estos esfuerzos que actualmente aportan un elemento diferenciador a una marca ante sus clientes y la sociedad en general, explica, en un futuro serán condición obligada para cualquier negocio que quiera mantener la preferencia en el mercado.
Medio millón de niños impactado
Con este entendimiento surgió el programa Eco Jornadas LTH en 2009, que a la fecha ha impactado a casi 560 mil personas con actividades vivenciales y mensajes de educación ambiental en más de 20 ciudades del país.
Las Eco Jornadas LTH permiten impactir actividades educativas y recreativas en lugares naturales emblemáticos como el Desierto de los Leones y el Bosque de Tlalpan en la Ciudad de México, Xochitla en Tepotzotlán, Chipinche en Monterrey, Cañón de Fernández en Torreón y Cabo Pulmo en Los Cabos.
Debido a la necesidad de expandir los beneficios del programa e impactar a mayor número de niños e incluso adultos, a la fecha se han implementado dos versiones más de las Eco Jornadas:
- Jornadas Familliares, abiertas a familias y público en general para que disfruten de actividades en parques ecológicos de la Ciudad de México.
- Uno a uno, programa itinerante que llega a las escuelas primarias para atender a los estudiantes y cuenta con el apoyo de los distribuidores LTH
El programa, respaldado por la marca de baterías LTH, cuenta además con el apoyo de organizaciones aliadas como Preservamb, Centro de Educación Ambiental Quetzalli, Fundación Xochitla, Parque Ecológico Chipinque, Pro de Nazas, Centro Ecológico Los Cuartos, Jardín Etnobotánico Francisco Peláez y Parque Ecológico la Planta.
El próximo jueves 29 de noviembre se llevará a cabo una Eco Jornada LTH en el Bosque de Tlalpan de la Ciudad de México, donde participarán estudiantes de primaria y preparatoria que recibirán educación ambiental de parte de especialistas de la organización Preservamb.
Comunicado de prensa