Erika Barón
La plataforma “Lazos de agua” tiene como objetivo un cambio de comportamiento en 45 comunidades de Guanajuato en las que se llevaron a cabo inversiones para brindar acceso sostenible al agua potable a través de infraestructura sustentable, además de prácticas de higiene para beneficiar a alrededor de 45 mil personas.
Con actividades colaborativas de arte social, como obras de teatro, talleres de títeres, creación audiovisual o muralismo, todo basado en la cultura local, se promueve la adopción de hábitos saludables que a las comunidades.
“Es necesaria la repetición, intensidad y constancia para que un proyecto social dé frutos a largo plazo, sólo así se mantendrá un cambio de comportamiento social y esto brindará la sostenibilidad necesaria para que funcione”, indicó en entrevista para ExpokNews Isabelle Viens, especialista en Arte Social para el Cambio de Comportamiento de One Drop™.
Aclaró que en los últimos años se han percatado de que esto no es suficiente si no se logra fortalecer el cambio de comportamiento de los participantes, el cual procuran a través de cultura y de empoderamiento, es decir, el arte social.
Hoy en día, este programa toma mayor relevancia pues las comunidades en las que se lleva a cabo se encuentran mejor preparadas ante la pandemia por COVID-19 en el país, pues fomenta hábitos de higiene que pueden prevenir esta enfermedad.
“Todo el proceso es una co-creación, porque al final no es un producto del artista es la creación del mismo participante y se puede ver de diferentes maneras; desde una obra de teatro hasta un cortometraje”, aseguró Isabelle Viens, especialista en Arte Social para el Cambio de Comportamiento de One Drop™.
En este tenor, Carlos Hurtado, gerente de Desarrollo Sostenible de Fundación FEMSA, agregó que Lazos de Agua se basa en el modelo A·B·C para la Sostenibilidad, conformado por tres principios: acceso, cambio de comportamiento y capital.
“Con ello se ha logrado anclar esos cambios en un contexto cultural muy local”, detalló al explicar que dicho proceso pretende que cierto segmento de la población sea parte del cambio de comportamiento pero que también tenga un rol de liderazgo, invitando a otros a ser parte de esa conciencia y manteniendo la infraestructura en óptimas condiciones.
Al inicio de esta intervención de arte social en las comunidades, sólo el 28% de los participantes mostraban un cambio en sus hábitos de higiene, “pero con el paso de los años esta cifra ya alcanzó un impacto del 41% de los habitantes de cada comunidad en la que han trabajado.
“De 2017 a la fecha han avanzado mucho en las capacidades y el tejido social. Los participantes se quedan con el ideal de organización e incluso se han impulsado otros hábitos que la comunidad necesita”, resaltó.
El proyecto inició en marzo de 2017, con la participación de Fundación FEMSA, One Drop, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y The Coca-Cola Foundation, así como de autoridades de gobierno nacional y local.
Hasta diciembre de 2019, ha beneficiado a 31 mil personas, pero se espera que en 2022 alcance la meta de 45 mil personas en México. De los cuales, ha logrado un aumento del 13% en personas que se lavan las manos en momentos clave, 34% pagan la tarifa del servicio de agua, 9% tratan en casa el agua para beber y 12% más almacenan el agua de forma segura en el hogar.
Lazos de agua es una meta a nivel global que tiene como objetivo llegar a 200 mil personas en México, Colombia, Guatemala, Nicaragua y Paraguay. Hasta ahora ha destinado una inversión de 50 millones de dólares y ya alcanzó los 98 mil beneficiados.