Dentro de un equipo de trabajo es normal encontrarte con colaboradores tóxico, colaboradores de alto desempeño, colaboradores promedio… y sí, aquellos que exigen más atención y capacitación por parte de su gerente o de la persona que esta a cargo de él.
Este tipo de compañero suele pedir retroalimentación casi por cada actividad que realice, pide revisión constante de su trabajo y hace todo por llamar la atención.
Muchos líderes se han enfrentado a este tipo de colaborador absorbente pero no todos han sabido manejarlo de la forma más responsable y terminan retirándolo de la empresa.
Los expertos como Amy Jen Su, CEO de Paravis Partners y Linda Hill profesora de Harvard Business School comparten que convivir con un colaborador de este tipo es un verdadero reto, ya que se requiere de mucha paciencia pero es parte de la responsabilidad social de la empresa, encontrar el equilibrio necesario para saber tratarlos y brindarles el apoyo que ellos requieren… después de todo, esto es parte de la construcción de un entorno laboral sano.
Así que, si tú estas a cargo de una persona así o conoces a alguien que lo está, te recomendamos compartirle esta pequeña guía que les ayudará a tratar con ellos. ¡Tomen nota!
4 recomendaciones para manejar colaboradores absorbentes
Paso 1: identifica la raíz del problema
Antes de tomar cualquier decisión, acércate con este miembro de tu equipo y ayúdalo a identificar el origen de su necesidad de atención. Sin embargo, y de acuerdo con Hill, no tomes el papel de terapeuta; simplemente intenta descifrar porque este colaborador te requiere tanto.
Quizá la fuente a este problema fue que en su anterior trabajo recibía tanta atención por parte de su jefe que se acostumbró a tenerla, tal vez solo es falta de confianza o autoestima, o quizá es la falta de estabilidad que le hace sentir la empresa, explica Hill.
Lo importante es que te tomes el tiempo de escucharlo y compartirle de manera educada tu opinión acerca de su comportamiento y de la necesidad que tiene por recibir tu atención. Una vez que has dado tu opinión sobre su comportamiento, es turno de que lo escuches.
Jen Su señala que los líderes responsables, saben la importancia que tiene escuchar a sus colaboradores y ayudarlos a corregir aquellos problemas que no les permitan desarrollarse de manera eficaz dentro del ambiente laboral. También es importante darles una retroalimentación en períodos cortos.
Paso 2: establece un nuevo vínculo de confianza
Aunque fortalecer la confianza en tu colaborador puede parecer una tarea complicada, sobre todo cuando identificaron la fuente de su inseguridad, existen cuatro consejos que Amy Jen y Linda Hill recomiendan para hacerlo:
1-. Conecta: en ocasiones los colaboradores pueden sentirse solos e ignorados por sus jefes, algo que provoca que ellos se acerquen a tu escritorio con cualquier excusa.
Un líder responsable sabe que debe acercarse y preguntarles cómo se sienten en el trabajo o tomarse aunque sea cinco minutos para comenzar una conversación. Esto además de acercarlos con su equipo de trabajo, rompe la rutina laboral y hace menos tenso el ambiente.
2-. Evalúa: no tienes que dar una retroalimentación todos los días y a todas horas, simplemente acércate en periodos cortos y brinda una retroalimentación positiva a cada uno de tus colaboradores. Recuerda que este tipo de dinámicas ayudan a aumentar la productividad de tu equipo de trabajo y fortalece la autoestima, algo que fomenta una estabilidad en ellos.
3-. Ofrece tu ayuda: todos necesitamos ayuda de vez en cuando, sobre todo cuando una tarea en particular se nos complica. Si uno de tus colaboradores está experimentando esta situación, no dudes en ofrecerle tu ayuda o una capacitación que lo ayude a desarrollarse y a cumplir con esa actividad.
4-. Establezcan nuevos objetivos: es importante que en esta nueva etapa establezcas nuevas metas como planes de desarrollo que ayuden a este tipo de colaboradores a mantenerse ocupados mientras cumplen con nuevos objetivos y crecen a nivel personal y profesional.
Paso 3: límites
Si a pesar de haber encontrado la fuente su problema y de haber establecido un nuevo vínculo de trabajo y nuevos objetivos, sigue ocupando más de tu tiempo con temas fuera de lo laboral, debes comenzar a establecer límites de forma responsable.
Jen Su comparte que aunque un buen líder debe estar al pendiente de sus colaboradores, no es saludable que esté disponible todo el tiempo, debido a que miembros del equipo pueden abusar de esta confianza.
Una forma en la que se puede ir reduciendo el número de veces que un colaborador de este tipo invada la oficina es establecer un día y horario a la semana para conversar, dar retroalimentación y escuchar sus inquietudes.
Paso 4: Qué y qué no hacer
1-. Reflexiona sobre la fuente de la necesidad de atención de tu colaborador.
2-. Fomenta un vínculo de confianza en tu equipo de trabajo.
3-. Establece límites que ayuden a tu equipo a crecer.
4-. No pierdas la costumbre de incentivar a tu equipo y ofrecer tu apoyo.
5-. No descuides la conexión con tu equipo tanto a nivel humano como profesional.
6-. No dediques más del tiempo necesario a un colaborador tóxico.
Recuerda que tan solo cinco minutos de tu tiempo pueden hacer la diferencia y aumentar la productividad.
Caso de éxito: impulsar a tus empleados y ofrecer una retroalimentación positiva
Tanto Amy como Hill, comparten que es importante que los líderes, además de conocer los pasos anteriores, conozcan un caso de éxito. Por ello comparten el de Kelly Max, CEO de Haufe y cómo resolvió su conflicto con aquel colaborador.
Kelly Max comentó que cada que se llega a encontrar con un colaborador absorbente, lo primero que trata de descifrar es, por qué la persona necesita tanta atención y qué es realmente lo que le está sucediendo.
En su trabajo anterior Kelly supervisó a John, un colaborador que parecía exigir más tiempo del que Kelly podría brindarle.
Él estaba constantemente llamando a mi puerta, y era frustrante. Yo tenía mucho trabajo y tenía que interrumpirlo. En el pasado, había tratado con empleados así pero la fuente de necesidad de Juan era diferente.
De acuerdo con Kelly, su empresa tenía un número de llamadas establecidas que cada colaborador tenía que cumplir en un periodo determinado pero John acudía a ella para decirle que esas cuotas no estaban funcionando para él y que sentía demasiada presión.
Para encontrar el verdadero problema de John, Kelly decidió conversar con él y hallar la forma de que él cumpliera con las cuotas y de no poner en riesgo su trabajo. Al final encontró que la forma de trabajar de John era otra y que el romper un poco las reglas establecidas el ayuda a cumplir e incluso a superar el número de llamadas y ventas.
Lo único que él necesitaba era encontrar un equilibrio entre su forma de trabajar y la de la empresa, además de recibir una retroalimentación que no obtenía de mis otros compañeros.
Aunque no fue nada sencillo Kelly encontró que a veces hay que romper las reglas para que un colaborador pueda desarrollarse y dejar de depender tanto de sus líderes.
Si tú tienes un caso parecido al de Kelly no dudes en compartirnos como manejaste a ese colaborador absorbente. Puedes dejarnos un comentario, o decirnos a través de Facebook y Twitter.