En los últimos años, el uso de materiales «extraños» por parte de las grandes marcas se ha convertido en una tendencia tanto de sustentabilidad como de innovación. En su constante búsqueda por generar productos que enamoren a su público y las ayuden a cumplir sus objetivos de RSE, las compañías han utilizado PET, desechos provenientes del océano y pantalones de mezclilla, entre otros.
Casi todos estos son materiales reciclados que se incluyen en el proceso de producción. La propuesta de la empresa Ananas Anam va un paso más allá al utilizar las hojas de piña, que normalmente se desechan, para crear cuero vegano.
Según reporta Fast Company, la historia comenzó cuando la experta en cuero Carmen Hijosa visitó Filipinas y descubrió que el cuero producido en el país era de muy mala calidad, pero que las hojas de piña tenían un gran potencial para crear un material más responsable.
El resultado de su investigación fue Piñatex, un textil que toma un material de desecho y lo convierte en objetos lujosos. Hijosa subraya que además en el proceso no se utiliza suelo, agua, pesticidas ni fertilizantes, por lo que su creación tiene una huella ecológica mínima, comparada con tanto con la del cuero proveniente de animales como del que se crea con plásticos.
Gracias a todas estas ventajas, ya son varias las empresas que han utilizado el material para crear zapatos, bolsas y otros productos. Entre ellas están Puma y Camper, que crearon prototipos para tenis,