Los habitantes rusos están comprando suministros extra de medicamentos, temiendo que se agoten en el país como resultado de las sanciones occidentales.
De acuerdo con Insider, la empresa de investigación farmacéutica DSM Group descubrió que en Rusia se adquirieron casi la misma cantidad de fármacos entre el 28 de febrero y el 13 de marzo del 2022, que en todo el mes de enero, informó el periódico ruso Vedomosti.
Los medicamentos lideran las compras de pánico en Rusia
El valor del rublo se desplomó, tras las restricciones y el cierre de empresas extranjeras en Rusia —como castigo por la invasión de Ucrania—, lo que disparó los precios de los artículos de uso cotidiano. Mientras tanto, la angustia por la guerra y sus consecuencias ha colocado a muchas personas del país dirigido por Vladimir Putin en el precipicio de una inminente crisis de salud mental, informó el Moscow Times.
Según Reuters, entre los medicamentos que los rusos están almacenando se encuentran los antidepresivos y los somníferos. En tanto, otros datos de DSM indican que las ventas de estos se cuadruplicaron, en comparación con el mismo periodo del año anterior.
La preocupación por el conflicto
La insulina, las hormonas, así como los medicamentos contra el cáncer y el corazón, también se encuentran entre los que han suscitado compras de pánico en Rusia. «Yo misma tomo L-tiroxina, ya que tengo problemas con la glándula tiroides, así que la tomo a diario y me preocupa», afirmó Valentina, una testigo residente de Moscú.
Por eso compré un suministro para un par de meses por adelantado, ya que me preocupa si podré encontrarlo en las farmacias más adelante. La gente lo pide en todas partes.
Valentina, residente de Moscú.
Por su parte, el director general del Grupo DSM, Sergei Shulyak, aseguró en un noticiero que la gente está haciendo compras debido al miedo.
Fue el miedo. El primer temor era que todo se encareciera y el segundo era que los medicamentos que necesitan no estuvieran disponibles en algún momento. Esos temores movían a la gente. Hicieron colas en las farmacias y compraron de todo.
Sergei Shulyak, director general del Grupo DSM.
Asimismo, el ministro de Salud ruso, Mikhail Murashko, pidió a la población que dejara de abastecerse desmedidamente, asegurando que no era necesario y que los proveedores afirmaban que las entregas continuarían de manera normal.
Además, en un discurso televisado junto al presidente Putin, añadió que había escasez de ciertos medicamentos como resultado de las compras masivas.
Por último, Shulyak declaró que, aunque ahora haya carencia temporal, la situación se estabilizará pronto, ya que tanto los productores rusos como los extranjeros seguirán suministrando medicamentos, aunque a precios más altos.