Los rinocerontes blancos del norte se acercan peligrosamente a la extinción al sólo haber un macho en el mundo.
A primera vista, Sudan parece como cualquier otro rinoceronte blanco del norte: fornido y ágil, con labios cuadrados.
Él pasta bajo el sol caliente, su cabeza masiva apuntando hacia el piso, con el vistazo ocasional a las personas que lo miran embobados desde vehículos en el santuario Ol Pejeta en el centro de Kenia.
Cuando no está revolcándose en su recinto, él se contonea alrededor de la sabana, deteniéndose brevemente para tomar agua de un pozo de cemento.
Pero Sudan no es cualquier rinoceronte. Él es el último rinoceronte macho blanco del norte que queda en el mundo entero.
Para un animal en el borde de la extinción, el destino de la subespecie recae en su habilidad para concebir con dos rinocerontes blancos hembra del norte en el santuario.
Las compañeras de Sudan, Fatu y Najin, viven en el santuario, donde los expertos están luchando por asegurarse que la subespecie no se extinga.
Además de varios métodos de reproducción, los animales se encuentran bajo protección 24 horas por guardias armados. Los rinocerontes son atacados por cazadores furtivos, guiados por la creencia asiática de que sus cuernos curan varios padecimientos. Los expertos dicen que el cuerno de un rinoceronte se ha convertido en algo más lucrativo que las drogas.
Aunado a la protección permanente, el santuario ha puesto transmisores de radio en los animales y envía guardabosques encubiertos a comunidades vecinas para recaudar información sobre la caza.
En el borde de la extinción
Con 42 años, Sudan es un anciano en términos de rinocerontes. Fatu de 15 es una jovencita, mientras que Najin tiene 25. Si bien los tres rinocerontes blancos del norte están físicamente saludables, la edad podría ser un factor, dijo George Paul, veterinario líder en el santuario.
«Sudan está viejo y puede que no sea capaz de montar y aparearse con una hembra”, dijo.
Además, tiene un conteo de espermatozoides bajo, lo que complica los esfuerzos naturales y científicos.
Najin podría concebir, pero sus patas traseras son tan débiles que puede que no sea capaz de soportar que un macho la monte.
«Ha habido apareamiento entre diferentes parejas en los últimos años, pero no concepciones”, dice Paul. “Basados en un examen de salud conducido recientemente, ambos animales tienen un ciclo estral, pero no se ha logrado ninguna concepción”.
Y si no se logra una pronto, el querido animal se habrá extinto.
Métodos alternativos de concepción
En la lucha contra el reloj, expertos internacionales han recurrido a la ciencia para intentar mantener la subespecie.
El rinoceronte blanco del norte no puede aparearse con un rinoceronte negro, pero puede caber la posibilidad de que pueda aparearse con un rinoceronte blanco del sur, dice Paul. Si bien los rinocerontes blancos del sur no están en peligro, Ol Pejeta tiene 19, ellos son una subespecie distinta genéticamente al rinoceronte blanco del norte. Aunque las crías no serían 100% rinocerontes blancos del norte, sería mejor que nada, dicen los expertos.
Un comité en el santuario también está investigando distintos medios de reproducción alternativa, incluyendo la fertilización in vitro.
«En otros países, se ha logrado la transferencia del embrión en una especie distinta de rinoceronte, de tal modo que, como técnica, puede suponerse que es la más prometedora”, considera Paul. “Sin embargo, estamos haciendo consultas entre los expertos en diferentes técnicas de reproducción para saber cómo proseguir”.
Cuenta regresiva a la extincion
La necesidad de preservar al rinoceronte blanco del norte es horrenda.
“Realísticamente, estamos viendo que estos animales morirán en la próxima década o cerca. Pero con suerte, usando métodos artificiales de reproducción, podamos recobrarlos en el futuro,” dijo Paul. “Esto puede significar que sucederá cuando los animales actuales estén muertos, pero podría suceder”.
El santuario adquirió a los rinocerontes blancos del norte –dos machos y dos hembras– en 2009 de un zoológico en la República Checa. Suni, el otro rinoceronte blanco macho, murió el año pasado.
En otro incidente, Angalifu, otro macho, murió en el zoológico de San Diego el año pasado, llevando a la especie un paso más cerca de la extinción.
No se conocen rinocerontes blancos del norte en estado salvaje.
Un total de cinco sobreviven en cautiverio en el mundo: tres en Kenia, uno en el zoológico de San Diego y otro en el zoológico de la República Checa.
Pero Sudan, macho, es su propia compañía.
Fuente: CNN
