La contaminación es un problema ocasionado por el hombre y la industrialización que aqueja a millones de personas en el mundo, principalmente en países como China, Estados Unidos y México, llegando a afectar incluso las actividades cotidianas de los habitantes ¿cómo revertir esta situación?
El smog va mucho más allá de una falta de estética en el paisaje de una ciudad; es el causante de muchas enfermedades gastrointestinales y respiratorias, además afecta la productividad, el ecosistema, el agua, la flora y la fauna. De ahí la importancia de tomar medidas inmediatas.
Buscando dar solución al problema, el diseñador holandés Dan Roosegaard, junto con su estudio, desarrolló un sistema que permite purificar el aire contaminado de una región.
Se trata de la Smog Free Tower, una torre de 7 metros de alto por 3.5 de ancho que tiene la capacidad de purificar el aire a una escala masiva. La estructura funciona como un extractor, eliminando las partículas contaminantes que generalmente contienen carbón.
¿Cómo funciona?
La torre es una estructura modular liviana previamente pensada para colocarse en plazas o parques públicos. Trabaja por medio de una tecnología de iones patentada, similar a la que utilizan los hospitales para la purificación del aire, pero a una escala mucho mayor.
Actualmente el proyecto es solo un prototipo que se tiene previsto consumirá 1700 W de energía, aunque se pretende utilizar energía solar para su funcionamiento; logrando trabajar y purificar 30 mil metros cúbicos de aire por hora, teniendo como parámetro que una persona consume en promedio hasta 20 metros cúbicos diarios.
Si de por sí el proyecto es una excelente propuesta y solución al problema de contaminación, la campaña de recaudación de fondos y de concientización es mucho mejor.
La torre de purificación no es un elemento aislado, forma parte de un proyecto mayor llamado Smog Free Project que busca crear conciencia en la comunidad acerca del problema tan delicado.
Dentro del proyecto se encuentra Smog Free Jewelry, una pieza de joyería, particularmente un anillo, que en su interior contiene la cantidad de carbón extraída de mil metros cúbicos de aire, es decir, lo que muchos de nosotros respiramos diariamente.
En la compra de cualquier pieza de joyería se aporta el dinero a la compañía para la implementación de esta tecnología que está prevista a lanzarse el primer ejemplar en setiembre de este año en Rotterdam, Holanda, y posteriormente replicar el sistema en Beijing, Los Ángeles, París y Distrito Federal.
Fuente:
arq.clarin.com
veoverde.com
Orale que buena idea la del anillo, espero pronto llegue esta torre a Querétaro y sin duda yo compraba ese anillo para apoyar a esta causa.