Alexis Bravo
El pasado domingo 30 de mayo, el equipo de fútbol Cruz Azul se coronó como campeón de la Liga MX tras 23 años sin llevar ese título. Hoy se dice que se rompió la maldición, sin embargo, la que sigue sin romper su maldición es la Cooperativa que permanece envuelta en controversias… y hoy nos recuerde un Cruz Azul sin responsabilidad social.
No solo están prófugos los exdirectivos de la cementera, siendo Billy Álvarez, ex presidente de Cruz Azul, el principal implicado, sino que además, la nueva administración también está envuelta en señalamientos de irresponsabilidad al no querer reconocer ni cumplir acuerdos con colaboradores ni proveedores.
La Cooperativa La Cruz Azul, constituida en 1931, sigue en el ojo del huracán pues tras los malos manejos de Álvarez, y la gestión de la nueva administración, al menos 10 mil familias que se sustentan de ésta se hallan en estado de vulnerabilidad, sin mencionar también a algunos eslabones de la cadena de suministro de la misma.
No es extraño entonces que en marzo del 2021, trabajadores de dicha cooperativa se manifestaran afuera de del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México, exigiendo atención para este conflicto que afecta a sus familias.
Cruz Azul sin responsabilidad social… ¿por qué?, ¿qué sucedió?
El 29 de julio del 2020, se giró una orden de aprehensión por los delitos de lavado de dinero, delincuencia organizada y administración fraudulenta en contra de Álvarez.
Dicha acción dio como lugar a sospechas de que el Cruz Azul fuera desafiliado de la Federación Mexicana de Fútbol, pues una de sus cláusulas dicta que ningún directivo de sus clubes puede estar involucrado en actividades ilícitas… ¿las respetarían o reforzarían la imagen de un Cruz Azul sin responsabilidad social?
¿Hay más directivos implicados?
Igual que Álvarez, se encuentran prófugos Mario Sánchez, director financiero; Eduardo Borrell, director jurídico; Víctor Garcés, ex director jurídico, todos pertenecientes a la Cooperativa La Cruz Azul, además de Ángel Junquera, abogado externo de la misma. Álvarez podría enfrentar una sentencia de entre 20 y 40 años de prisión, los otros coacusados una pena de 10 a 20 años.
¿Metieron goles fuera de la portería?
Se presume que desde el 2016, la dirección general de la Cruz Azul, autorizó el pago de sumas millonarias a empresas que brindan servicios de «consultorías», «relaciones públicas» y a otras por las prestaciones de oficinas.
De acuerdo a Mexicanos Contra la Corrupción e Impunidad, tienen en su poder 51 facturas del 2016-2017, que suman la cantidad de al menos 191 millones, 768 mil pesos a dichas empresas.
La mayoría de éstas tiene sus domicilios fiscales en Metepec, Estado de México y otras, tienen al mismo representante legal. Los pagos millonarios a estas empresas fueron autorizados por Álvarez. En noviembre del 2017, Margen Asesores S.C, expidió una factura con uno de los mayores montos: 31 milllones 328 mil 157 pesos.
¿Desde cuándo empezó la goleada?
Las cosas comenzaron en 1992, con la creación de la empresa Blue Eagle Re, creada por la dirección de la Cooperativa la Cruz Azul, con sede en las Islas Caimán, siendo Billy Álvarez la cabeza de ésta.
«Blue Eagle Re era una empresa de reaseguros, según se creó para que la Cooperativa la Cruz Azul entrara al mercado de seguros y para que pudiera obtener ganancias por asegurar sus plantas productoras de cemento y por el manejo de las pólizas de los seguros médicos de los cooperativistas», según información de Mexicanos contra la Corrupción.
Sin embargo, a finales del 2007, se transfirieron las acciones de Blue Eagle Re a Lummar H. Corporation, la cual era una empresa papel pues no tenía trabajadores ni actividad productiva, así es que cuando en 2009 se da a conocer la presencia de estas empresas, dentro de la Cooperativa comienza a haber inconformidades pues no entendían como el dinero se veía reflejado en cuentas de otros países.
Desde el 2011 se había buscado la destitución de Billy Álvarez con múltiples denuncias de los cooperativistas, sin embargo, él apeló para que esto no ocurriera, hasta julio del 2020, cuando, después de su fuga ante la orden de aprehensión, fue destituido, dejando un desfalco y la imagen de un Cruz Azul sin responsabilidad social. Hoy lo busca la Interpol en 194 países.
Y la nueva administración ¿qué tan responsable fue al entrar a la cancha?
Para octubre del 2020, se reconoció legítimamente a Antonio Marín y a Víctor Velázquez como los presidentes de los Consejos de Administración y Vigilancia de la Cooperativa.
Cualquiera pensaría que el camino se enmendaría y romperían la percepción de un Cruz Azul sin responsabilidad social, pero en mayo del 2021, con información de La Jornada, se les señaló porque hasta ese momento, al menos 200 socios seguían sin resolver la situación de su sueldo por decisión de ambos, ya que ellos tienen en su poder los recursos financieros.
La afectación llega incluso a trabajadores con más de 15 años de antigüedad en la Cooperativa Cruz Azul, asimismo a viudas que no pueden cobrar pensiones y a otros que estaban por pensionarse. Dichas personas se pronunciaron a favor de Federico Sarabia Pozo para que el quedase como presidente del Consejo de Administración.
Trabajadores de la cooperativa acusan a Marín y a Velázquez de terrorismo laboral, pues asumieron que la no resolución de sus sueldos y, por añadidura, que hayan dejado a otros sin trabajo, era un conflicto de intereses por no estar de acuerdo con sus cargos.
El problema no termina allí. Hay proveedores que también han tenido que quedarse sin sus pagos porque la nueva administración no reconoce el trabajo realizado al no haberse pactado con ellos.
Este incluso es el caso de Expok, que durante años había sido un prestador de servicios de la Cooperativa en materia de comunicación, y cuando se quiso hacer efectiva la facturación, la respuesta es que no había un contrato firmado y que por ende no se reconocía la deuda.
La situación en la Cooperativa la Cruz Azul sigue estando con conflictos que no ven solución, pues en la misma administración y con sus propios trabajadores siguen existiendo conflictos de poder.
Toda esta situación deja en claro algo… el equipo azul por fin logró ser campeón, pero la realidad es que un Cruz Azul sin responsabilidad social es un campeón sin corona, porque una organización no puede presumir de liderazgos cuando la responsabilidad se ha ausentado de sus filas en detrimento de sus propios colaboradores y proveedores.
La realidad en Cruz Azul es que hoy todos los implicados en las defraudaciones siguen prófugos; asimismo, hoy hay personas que están en incertidumbre de sus futuros económicos; y también hoy sabemos que la Federación Mexicana de Fútbol no cumplió y no aplicó sus cláusulas que aludían a la ética… de modo que hoy, los directivos de Cruz Azul festejan que son campeones después de 23 años, pero como dijimos, son campeones sin corona.
