Una investigación de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad dice que en lo que va del 2019, el gobierno del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), ha entregado cinco contratos por 16.7 millones de pesos a empresas fantasma.
Contratos a empresas fantasma que AMLO entregó
En la investigación de la periodista Valeria Durán Villanueva y el investigador Leonardo Núñez González, se revela que el pasado 7 de febrero, la oficina del IMSS en Tapachula, Chiapas, extendió una invitación a una adjudicación directa para la “adquisición de materiales diversos”.
Dos empresas presentaron diferentes propuestas donde la ganadora fue Interacción Biomédica y los cuatro contratos que ha recibido este año, vienen por parte de una empresa fantasma.
Mientras el presidente @lopezobrador_ asegura que no dará contratos a empresas corruptas, durante el 2019 el gobierno federal ha otorgado contratos a cinco empresas fantasma. ¿Qué mecanismos tiene el gobierno para evitar estas prácticas? https://t.co/XBhvEWkRyF pic.twitter.com/GLPpjx5rtx
— MXvsCORRUPCIÓN (@MXvsCORRUPCION) 29 de abril de 2019
Según la investigación, “desde el 26 de julio de 2017 el Servicio de Administración Tributaria (SAT) había publicado de manera definitiva que Interacción Biomédica S.A. de C.V. era una empresa fantasma”.
Este no es el único caso. En enero, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes publicó la convocatoria a una licitación para la verificación de la calidad en las obras de construcción de la Red Carretera Federal en Sonora.
Según la investigación, «la SCT eligió a la que aseguró «las mejores condiciones disponibles en cuanto a precio, calidad, financiamiento, oportunidad y demás circunstancias pertinentes y firmó un contrato por 6.6 millones de pesos”.
Cabe mencionar que cinco empresas hicieron preguntas al respecto, finalmente, dieciocho hicieron propuestas económicas y dejaron su documentación correspondiente.
De acuerdo con la convocatoria, los participantes debían entregar varios documentos, entre los que se encontraba una «constancia de situación fiscal emitida por el SAT, expedida no mayor a 20 días a la fecha de la apertura y presentación de la proposición». Al recibir las propuestas, tres de los dieciocho participantes no habían cumplido con este requisito.
En la SCT evaluaron las diferentes cotizaciones y documentos durante poco más de un mes y el 5 de marzo de 2019 emitieron su fallo. Ocho empresas fueron desechadas porque incumplían con requisitos de la convocatoria y se consideraron insolventes.
De entre las diez restantes que pasaron el filtro, la SCT eligió a la que aseguró «las mejores condiciones disponibles en cuanto a precio, calidad, financiamiento, oportunidad y demás circunstancias pertinentes» y firmó un contrato por 6.6 millones de pesos.
La empresa ganadora, Índico RT S.A. de C.V. también aparecía en el Diario Oficial de la Federación (DOF) de manera definitiva como una empresa fantasma.
En teoría, de haberse respetado las bases de la convocatoria, así como el artículo 50, fracción XIV de la Ley de Adquisiciones, una persona física o moral listada por el SAT de manera definitiva no debería poder obtener contratos del gobierno, pero no fue así.
¿Qué es una empresa fantasma?
Una empresa fantasma es una sociedad que se utiliza ilícitamente para realizar operaciones empresariales simuladas y que no tiene activos reales o constituyen fachadas corporativas que tienen por única finalidad defraudar o evadir la aplicación de la ley.
¿Cómo detectar una empresa fantasma y evitar relacionarse con ésta?
La respuesta es la misma que con las personas físicas: si no la conocemos o no tenemos referencias, no conocemos sus oficinas o domicilio, y no sabemos quién la integra, es mejor no vincularnos.