A medida que el cambio climático y le cuidado y le cuidado del ambiente se han convertido en prioridades de los gobiernos, la basura toma un papel preponderante en las decisiones políticas, económicas y científicas de nuestro planeta.
En 2009, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) inauguró el Programa Nacional para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos, cuyo objetivo es “contribuir al desarrollo sustentable de México a través de una política ambiental de residuos basada en la promoción de cambios en los modelos de producción, consumo y manejo que fomenten la prevención y gestión integral de los residuos sólidos urbanos”.
El programa propone incrementar la capacidad actual de instalaciones para la separación de este tipo de residuos, incrementar el vidrio, cartón, plásticos diferentes al PET y metales aprovechados, así como la utilización de residuos orgánicos, el fomento y aplicación de tecnologías para el manejo de residuos y un plan de colaboración entre la iniciativa privada y el gobierno.
A finales del año pasado se cerró el Bordo Poniente, tiradero que en su momento llegó a recibir 12 000 toneladas de basura al día. Como parte de las políticas de recolección y manejo de residuos, el gobierno del DF dio a conocer un acuerdo con las cementeras Cemex y Cruz Azul, donde señala que estas empresas comprarán a la ciudad bolsas de plástico, colchones, llantas y hasta zapatos para convertirlos en combustible para sus hornos. “En forma de ´pacas´, dice el comunicado, los residuos serán enviados por el gobierno del DF, vía tren, a los destinos que indiquen las cementeras eliminando así desechos sólidos que regularmente van a parar al relleno sanitario al no poder degradarse o reciclarse”. Fernando Aboitiz, secretario de Obras y servicios del Distrito Federal, sostiene que el gobierno recibirá 140 pesos por tonelada métrica.
Otra alternativa para el uso de los residuos es el biogás obtenido por medio de la descomposición de desechos orgánicos. De acuerdo con la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y alimentación (SAGARPA), la planta de biogás de Monterrey “genera 16.96 kilowatts de energía, suficiente para alimentar el sistema de bombeo de agua de la ciudad, el alumbrado público de la ciudad y sus municipios conurbados, el Metro y varios edificios públicos”. Recientemente, el gobierno de Aguascalientes, en colaboración con la industria privada, abrió 8una planta de energía eléctrica generada por el gas del relleno sanitario de San Nicolás de Arriba.
De acuerdo con Hugh Richmond, director general de ENERG-G Natural Power, “esta planta reducirá las emisiones de dióxido de carbono al ambiente en 90 000 toneladas al año, equivalente a los beneficios de 7 045 hectáreas de bosque de pinos”. La ciudad de México se encuentra en proceso de licitació para concesionar el gas metano producido por el relleno sanitario del Bordo Poniente.
Fernando Menéndez, presidente de la Comisión Integral de Gestión de Residuos del DF, señaló que se requiere de una inversión de 1 800 millones de pesos “para capturar el biogás, limpiarlo, quemarlo en una termoeléctrica y enviar la energía eléctrica que se genera al sistema integrado regional”. Menéndez señaló que el gobierno no contaba con los fondos necesarios, por ello será la iniciativa privada la que asuma los riesgos y beneficios de la inversión.
Fuente: Revista Equilibrio
Publicada: abril de 2012
Asi como los gobiernos de Monterrey y Aguascalientes que hicieron el esfuerzo para desarrollar los proyectos de generar energia limpia a tra ves de la captura del gas metano de la descomposison de la basura , todos los gobiernos de los estados de la Republica pueden hacer lo mismo y lograriamos reducir las emisiones de gases eneormemente. Pero por desgracia el cuidado del medio ambiente no es prioridad para los gobiernos estatales y tampoco para los candidatos a la presidencia de la Republica.