En el inicio de la cumbre sobre el cambio climático – COP21 – el último domingo, que se lleva a cabo en París (Francia), más de 10 mil personas donaron sus zapatos para simbolizar la imposibilidad de organizar manifestaciones en la ciudad a causa de la amenaza terrorista que vive dicha nación, tras los atentados del pasado 13 de noviembre.
En la Plaza de la República de París se observaron unos zapatos negros del papa Francisco, unos marrones del cardenal Peter Turkson, otros del cardenal brasileño Cláudio Hummes, las zapatillas del secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, entre otros calzados de diversas personalidades, que vieron en esta colecta popular una forma de expresarse y hacer sentir su voz, tras la multitudinaria manifestación que inicialmente estaba programada al inicio de la COP21.
Béline Joye, de la asociación Avaaz, explicó a la agencia EEF que el objetivo era “ofrecer una alternativa a los parisinos” en nombre del “derecho a la libertad de expresión”, en este caso para decir que “el medio ambiente es una de las causas de todo lo que nos ocurre actualmente”.
Según explicó, el gesto buscó establecer normas para que en el horizonte de 2050 el 100% de la energía sea de origen renovable.
“Hacen falta cambios” en la política para hacer frente al cambio climático, subrayó el cardenal Cláudio Hummes, arzobispo emérito de Sao Paulo, que insistió en que el papa con sus zapatos quiere mostrar que “está muy cerca de la gente”.
Datos
En total, Avaaz logró recolectar alrededor de 15 mil pares de zapatos en París y sus alrededores. Diversas ONG, como Greenpeace, se han quejado de un uso abusivo del estado de emergencia en Francia para acallar a los que querían mostrar su descontento durante la COP21.
Fuente: peru21.pe