Si creías que los humanos solo eran reemplazados por robots en películas como Terminator, Yo, Robot, o series comoLos Supersónicos temo decirte que estas muy equivocado, y que en unos pocos años tu lugar de trabajo podría ser ocupado por una de estas máquinas. El futuro de los negocios puede estar más robotizado de lo que pensabas.
No nos referimos a que verás a un humanoide en tu asiento, pero tus tareas están muy cerca de automatizarse debido a que el avance tecnológico es tan grande que muchos de los inventos y softwares están realizando cada vez más, pequeñas labores rutinarias.
La inteligencia artificial se está extendiendo a través del sector de los servicios, hoy, hay bots que hacen reservaciones para hoteles, restaurantes y líneas aéreas; las impresoras fabrican objetos tridimensionales, haciendo obsoleta mucha mano de obra; los teléfonos móviles reemplazan a los asistentes personales; los softwares financieros y contables dejan poco espacio para tareas humanas en este sentido. Estos son solo ejemplos a bote pronto pero todas las industrias lo están viviendo. El entorno laboral está entrando a una revolución de la que podríamos salir no muy bien librados… e irónicamente, la responsabilidad social tendrá mucho que ver en ello.
¿El futuro de los negocios será distópico o humano?
El profesor Michael Laitman, comparte que la perspectiva sobre un futuro sin trabajo es inminente pero que debajo de la superficie fría y tecnológica, hay una cuestión más trascendente que nadie se está cuestionando: ¿cuál será el papel del ser humano en el futuro y hacia dónde vamos como sociedad?
Para encontrar una buena respuesta a esta pregunta y tener un pronóstico sobre la realidad del humano contra una máquina, Laitman analizó cuatro puntos esenciales que van desde la evolución humana hasta su papel frente a la tecnología, llegando a una interesante conclusión pero antes de compartirla, recorre con nosotros estas cuatro importantes claves:
1-. Evolución humana. La fotografía más grande
Hasta el día de hoy, los seres humanos han estado bastantes ocupados con el establecimiento de su existencia física en el Planeta Tierra. En un inicio, cazaban, y vivían en cuevas. Posteriormente, pasaron a un estilo de vida más civilizado y crearon casas con sistemas de calefacción y comenzaron a industrializar la comida; poco a poco fueron delegando las necesidades básicas a grandes aparatos y se fueron olvidando del proceso que tiene cada alimento para ser cultivado.
Conforme la tecnología se fue apoderando de nuestra rutina, un nuevo mundo empezó a abrirse paso. A medida que vamos descubriendo que podemos automatizar la producción de alimentos, agua, vivienda y ropa, nuestro tiempo, energía y concentración podrían ser invertidos en lo que más debe importar: “el desarrollo de la esencia del ser humano dentro de nosotros, junto con la curación y el cuidado de la humanidad en una sociedad”.
2-. ¿La ventaja del hombre sobre el robot?
Antes, muchos científicos y un gran porcentaje de la sociedad se cuestionaba sobre la ventaja del hombre sobre el animal pero, próximamente, esta pregunta podría ser: ¿qué ventaja tienen los hombres sobre el robot?
Muchos pensarán que la respuesta a esta pregunta abarca una cuestión filosófica pero no, la solución a esta pregunta será un problema que puede, o no, determinar el destino de la raza humana.
El avance de la tecnología y sus distintos dispositivos pintan dos futuros para nosotros: podríamos utilizar la tecnología más sofisticada para provocar la tercera guerra mundial, que acelere la destrucción del planeta, o podríamos construir los medios necesarios para cubrir las necesidades de los humanos y hacer frente a los problemas globales, que actualmente, están impidiendo el desarrollo a nivel mundial, aunque si queremos esta última opción, tenemos muchas cosas por cambiar y poco tiempo. El cambio climático es el ejemplo más claro de esto.
¿Por dónde iniciar? Para crear un verdadero impacto se necesita del esfuerzo de todos, tanto de empresas como de la sociedad, tenemos que reconocer que nuestra unión ha sido egoísta y que cada uno solo ha visto por sus propios intereses sin percatarse del verdadero impacto que provoca. Debemos estar conscientes de que el mundo es un sistema integrado que nos obliga a crear alianzas y unidades.
Nuestros valores y propósitos, aspiraciones personales y lo que hacemos con nuestro tiempo, deben comenzar a enfocarse en la consolidación de nuestras relaciones humanas. Al hacer esto, fomentamos una nueva fuente de prosperidad, plenitud y que la sociedad comience a trabajar como un solo equipo.
Si te das cuenta, esto es la esencia de la Responsabilidad Social Empresarial… y por desgracia, aquí es donde vemos que muchas compañías solo usan una careta para denominarse así pero no están produciendo el cambio necesario en el mundo.
3-. Una nueva cultura
De acuerdo con varios campos de ciencias sociales y biológicas, los seres humanos trabajan mejor cuando se sienten conectados con sus compañeros, se desarrollan en un ambiente amigable y fomentan un vínculo de confianza, lo suficientemente fuerte, para que todos avancen hacia una misma dirección.
Fomentar esta conexión entre seres humanos no es tarea fácil. Los arranques de egoísmo tienen que estar en constante equilibrio con los valores, ya que como seres humanos, tenemos el impulso de ser egoístas, pero al mismo tiempo, buscamos la convivencia social. Así que en lugar de luchar por el auto-acaparamiento, debemos tratar de conectarnos y trabajar en equipo en un clima social que nos llevará a competir por la contribución social.
Para lograrlo muchas personas deberán someterse a la formación y el trabajo posterior como educadores y organizadores de la comunidad para crear y mantener un clima social positivo. Nuevamente… una tarea vista en la responsabilidad social.
4-. El dilema del robot vs el humano
Si deseamos evitar desarrollos caóticos y vivir bajo la conquista de una civilización robótica. Debemos comenzar a cambiar al mundo desde ahora, convirtiéndolo en uno más sustentable e inclusivo, buscando el bien social a nivel mundial.
Tenemos que preocuparnos más el uno por el otro, cuidar el ambiente, reducir los efectos del cambio climático, y adaptar las funciones sociales y educativas necesarias para esta nueva era tecnológica.
Retomando ahora la conclusión del profesor Laitman…
En mi opinión, esto es lo que la mayoría de la gente tiene que hacer, conscientemente, conseguir el camino correcto como sociedad. Nuestra inteligencia, el ingenio y la creatividad pueden ser utilizados para elevar la calidad de las conexiones humanas.
Esto no es una quimera, sino más bien el único esfuerzo realista y pragmático que se puede llevar a cabo para evitar un futuro distópico, agregó.
La única forma de acceder a un futuro amigable donde el hombre no sea sustituido por los avances tecnológicos es comenzar a trabajar en conjunto: empresas, industrias, gobiernos y seres humanos. Combatir los problemas globales que nos están afectando actualmente y dejar de buscar la violencia y el egoísmo que solo provoca más pobreza, muertes y un retraso en la evolución del ser humano.