Muchas empresas ya se han unido al cuidado ambiental al bajar su nivel de contaminación pero esa chamba no es nada más de ellas, nosotros también debemos generar alguna acción para que nuestro ecosistema mejore.
¿Puedes creer que mucha de la basura que tiramos alrededor de las playas o en las calles ha llegado a una isla muy alejada de nuestro país?
¡Así es! 18 toneladas de basura cubren la deshabitada isla de Henderson, ubicada en el archipiélago británico de Pitcairn en el Pacífico Sur. Científicos han encontrado 37.7 millones de desperdicios plásticos en el que es uno de los lugares más apartados de la tierra.
Expertos aseguran que si la contaminación continúa de esta manera, el planeta tendrá varias consecuencias graves debido al cambio climático y el calentamiento global
De acuerdo con un estudio que llevó a cabo Jennifer Lavers, del Instituto de Estudios Marinos y Antárticos de la Universidad de Tasmania, se verificó la presencia de 671 restos de basura por metro cuadrado en la isla, el más alto índice del mundo, según la revista científica Proceedings de la National Academy of Science.
Esto significa, una situación crítica que está afectando a las costas de este lugar deshabitado, nombrada por la Unesco Patrimonio de la Humanidad en 1988.
Entre los desechos se encuentran boyas de pescar, cascos, cepillos de dientes, envases de plástico, entre otros residuos.
La distancia no impide que los desperdicios lleguen a este lugar. El territorio, de 37 kilómetros cuadrados, se encuentra a más de 5.000 kilómetros de distancia de la masa continental más cercana y solo recibe visitas con fines científicos cada cinco o diez años.
En el estudio explica que cada una de las principales razones de este problema ambiental, sería la ubicación de la isla, próxima al giro Oceánico del Pacífico Sur, donde las corrientes marinas podrían transportar la basura desde lugares distantes.
Así, desperdicios de Estados Unidos, Japón, China, Perú, Ecuador, Chile, Francia, Alemania, España y Reino Unido podrían ir a parar a esta isla que según los investigadores recibiría 3.570 desechos cada día.
«Lo que ha sucedido en la isla de Henderson demuestra que no hay escape de la contaminación plástica incluso en las partes más distantes de nuestros océanos…Lejos de ser la prístina isla deshabitada que la gente podría imaginar de un lugar tan remoto, la isla de Henderson es un ejemplo chocante pero típico de cómo los desechos plásticos están afectando el medio ambiente a escala global», explica Jennifer Lavers, autora principal del estudio.
Lamentablemente se pronostica que la contaminación en Henderson y en el planeta se agravará en el futuro debido al cambio climático y el calentamiento global y originará “que muchas de las corrientes que conocemos cambien en la dirección, profundidad o velocidad».
Estas modificaciones causarán cambios en la acumulación del plástico en los próximos años, «lo que puede exponer a los mismos problemas a nuevas comunidades de especies de otros lugares», precisó Lavers, que insitó a los gobiernos del mundo a gestionar mejor la basura y compartir sus conocimientos con las naciones menos desarrolladas.
