Debido a la cantidad de contaminación que hay en el mundo, varios países han decidido hacer algo para cambiar las expectativas y modificar los números en pro del planeta.
Algunas empresas han reducido el nivel de CO2 y otros contaminantes para proteger el ambiente y cuidar los recursos naturales, pero el gobierno también ya ha impuesto reglas para que se reduzcan estas emisiones.
Durante los primeros cinco meses del 2017, México recaudó 95 mil 795 millones 900 mil pesos por concepto de impuestos ambientales del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS).
Del dinero recaudado, 86 mil 986 millones 800mil pesos provinieron de gasolinas y diésel, mientras que ocho mil 809 millones 200 mil pesos de plaguicidas y carbono; 79% corresponde a la venta de combustibles a nivel federal.
La Secretaría de Hacienda respondió así a un exhorto emitido por la Comisión Permanente para conocer la forma en que ha operado el régimen fiscal del país.
El documento que fue emitido por la Administración General de Planeación, Administración Central de Estudios Tributarios y Aduaneros del Servicio de Administración Tributaria, detalla los impuestos recibidos por mes y tipo de producto que lo generó.
En él, se puede observar que de enero a mayo, México tuvo un total de 86 mil 986 millones 800 mil pesos por venta de gasolinas y diésel; de los cuales, 76 mil 261 millones 400 pesos, es decir, 87.67%, provienen del servicio federal y 10 mil 725 millones 400 mil pesos del servicio en los estados.
Durante el mismo periodo, los plaguicidas generaron un total de 262 millones 800 mil pesos de impuestos ambientales y el carbono tuvo un comportamiento variable, ya que en enero registró una pérdida de mil 302 millones 600 mil pesos, pero a partir de febrero comenzó a reponerse hasta que en abril sumó ocho mil 491 millones 300 mil pesos, por lo tanto, el carbono generó ingresos, entre febrero y mayo por ocho mil 546 millones 400 mil pesos.
Impuestos ambientales en México
El aumento de problemas ambientales en el mundo han obligado a que los países diseñen políticas públicas para reducir la contaminación ambiental sin afectar el crecimiento económico.
De acuerdo con datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
El Programa Nacional Forestal (PRONAFOR) fue ejecutado por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), que en 2014 y 2015 se le asignaron vía Presupuesto de Egresos de la Federación 145 millones de pesos para la adquisición de vehículos para la prevención y combate de incendios forestales.
Actualmente México recauda 0.1% del PIB por impuestos ambientales, pero si pone más énfasis en estos gravámenes tendrá resultados positivos para las finanzas públicas, sus ecosistemas y la salud de sus habitantes, estimó el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), una asociación civil que se especializa en estudios fiscales del sector público.
En comparación con países como Australia, Alemania, Chile y Estados Unidos, México es el que menos recauda por este concepto.
Impuestos ambientales en el mundo
En Brasil, el impuesto ambiental sobre la Circulación de Mercaderías y Servicios (ICMS) es interestatal y aplica una tasa de entre 7% y 12% dependiendo del estado.
En Chile, el Impuesto Verde a Fuentes Móviles, se aplica a vehículos nuevos, dependiendo su rendimiento urbano y tiene como fin promover el uso de vehículos que contaminen menos.
Finlandia es el primer país del mundo en implementar un impuesto a las emisiones de CO2. Por otro lado, Dinamarca y Noruega destacan en cuando a recaudación de impuestos ambientales con 9,243.7 y 9,502.8 millones respectivamente.