Algunas personas piensan en los satélites como máquinas de alta tecnología que los científicos lanzan al espacio quién sabe para qué. Pero la verdad es que desde hace mucho tiempo los satélites forman parte de nuestra vida cotidiana; y nos ayudan en más formas de las que podemos imaginar. Pero, ¿es posible que a partir de Data satelital se rescate al planeta de la catástrofe climática?
De acuerdo con la reciente conferencia climática COP26 organizada por la ONU, 2021 fue el punto de inflexión necesario para tomar medidas ante la emergencia climática. Es así, como el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) enfatizó que para alcanzar los objetivos climáticos fijados en el Acuerdo de París es inminente que todos los países del mundo centren su trabajo en tres objetivos:
- Estimular la acción inmediata y comenzar a reducir las emisiones contaminantes.
- Cumplir la promesa de 100 000 millones de USD y estimular la financiación privada a gran escala necesaria para alcanzar el Acuerdo de París.
- Fomentar soluciones para la adaptación a los impactos climáticos, como los fenómenos meteorológicos extremos.
Y es este último punto donde nos centraremos.
La resiliencia es un catalizador para el desarrollo urbano sostenible. Por que busca garantizar que los beneficios del desarrollo no se pierdan cuando las ciudades se encuentren frente a las adversidades. Asimismo, prevé que las naciones sean capaces de estar preparadas; continúen prosperando ante un entorno adverso y de grandes desafíos como son el cambio climático y la urbanización.
Una ciudad resiliente evalúa, planifica y actúa para prepararse y responder a todos los peligros, repentinos y lentos, esperados e inesperados, especialmente aquellos derivados del cambio climático.
Resiliencia y Reducción de Riesgos, ONU-Hábitat.
Data satelital el gran aliado
La tecnología satelital ha recorrido un gran camino hasta nuestro días. Hoy guían a nuestros destinos, nos ayudan a mantenernos en contacto. Piensa por un momento cuando usas la navegación por satélite mientras conduces al trabajo, quizás para verificar si hay congestión y obras viales; consulta el pronóstico del tiempo antes de elegir qué ponerte.
¡Todas esas cosas son posibles gracias a la tecnología basada en el espacio! Pero el trabajo satelital no se limita al entretenimiento y la navegación. La data satelital podría ofrecer las respuestas a uno de los mayores problemas que enfrenta la humanidad: el cambio climático.
Antes de comenzar a hablar sobre la importancia de los satélites para el futuro del planeta, definamos que entendemos por satélite:
La palabra «satélite» se refiere a una máquina que se lanza al espacio y se mueve alrededor de la Tierra u otro cuerpo en el espacio.
National Aeronautics and Space Administration
Y si bien, sabemos que la Luna y la Tierra son satélites naturales, también existen miles de satélites artificiales o hechos por el hombre y orbitan la Tierra. Es así, por ejemplo, que un grupo de más de 20 satélites conforman el Sistema de Posicionamiento Global o GPS; estos satélites pueden ayudar a determinar una ubicación exacta.
Pero eso no es todo, así como en el transporte existen diferencia entre un avión, un barco y un automóvil, en los satélites ocurre lo mismo diferentes: hay lo que se conoce como satélites que hablan, miran y escuchan.
Es así como los satélites parlantes proporcionan ancho de banda y conectividad para las telecomunicaciones. Los satélites de observación, que son probablemente la parte más grande y mejor conocida de la observación de la Tierra, se basan en capturar los reflejos del sol en la superficie de la Tierra; proporcionan mucha información visual y análisis sobre el uso de la tierra y los caudales de los ríos.
El futuro del planeta está en la data satelital
Sí, la data satelital sobre el clima es crucial; afecta al menos a un tercio de la economía global y al 100% de la población mundial. Ahora imaginemos cómo obtener esta información podría ayudar a los agricultores a determinar cuándo deben cosechar o regar los cultivos. En la industria de la construcción, los trabajadores podrían usar los datos para ver si habrá demasiado viento para operar una grúa, en números aproximados.
Actualmente el desarrollo de estas aplicaciones basadas en el espacio son lideradas por la iniciativa privada; cuando en algún momento era únicamente un nicho del gobierno. Y ello ha permitido las mejoras y avances de la información geoespacial, así como la reducción de costos de inversión.
El caso de Spire Global —empresa de análisis y datos del espacio a la nube— que administra una de las constelaciones de satélites más grandes del mundo es un ejemplo de negocio que proporciona datos, análisis y servicios basados en el espacio a unas 400 entidades del sector público y privado. Con oficinas en Europa, América del Norte y Singapur; hoy cotiza en la bolsa de valores.
Los satélites juegan un papel absolutamente vital en el seguimiento y la medición del cambio climático. Y podrían ayudar a resolver problemas particulares del planeta, mejor que cualquier otra solución.
El futuro espacial
Algunas estimaciones sugieren que el costo de las predicciones meteorológicas inexactas está en el rango de $2 billones a $4 billones. Ese número aumentará debido al cambio climático
Spire, se centra en los satélites de escucha, que utilizan un amplio espectro de frecuencias de radio para observar lo que sucede en la Tierra. La ventaja es que puede usar estos satélites día y noche, 24 horas al día, 7 días a la semana, en cualquier condición climática, en todo el planeta.
Estos datos, por ejemplo, se utilizaron para rastrear y predecir un enjambre de langostas que estaba destruyendo cultivos en África; la data satelital permitió reproducir este enfoque unos meses después, cuando cigarras estaban saliendo en los Estados Unidos.
Ciertamente, tecnología espacial como la que administra Spire, brindaria a la humanidad la capacidad de planificar con anticipación incendios forestales, huracanes e inundaciones, a través de datos y análisis. Ello significaría una luz para la humanidad a adaptarse al cambio climático.
Muchos expertos creen que el espacio, especialmente la observación de la Tierra, está inexorablemente conectado con la lucha de la humanidad contra el cambio climático. Sin embargo, a medida que avance la exploración espacial, la fabricación en órbita, la capacidad de construir estructuras en el espacio, quizás usando robots autónomos, será importante para comprender, orientar y mejorar la vida en la Tierra. También se abre la puerta para el turismo espacial.