Obesidad, diabetes, enfermedades cardiovasculares, tabaquismo y depresión no nada más son las principales causas de muerte en México, sino también las razones más frecuentes de ausentismo laboral, el origen de la improductividad de los trabajadores, el motor de una alta rotación del personal y, por ende, la causa de la poca retención de talento en su empresa, de acuerdo con el Consejo Empresarial de Salud y Bienestar.
La mitad de los trabajadores de una empresa en México -según un estudio elaborado por Empresa Saludable entre 20 compañías del país- tiene sobrepeso u obesidad, 33% registra colesterol elevado, 30% sufre depresión, 25% fuma, 20% padece hipertensión y 12% es diabético.
Este panorama priva a pesar de que la implementación de programas de bienestar en las empresas ha ganado terreno en los últimos años. Tan sólo el Consejo Empresarial de Salud y Bienestar, que agremia a compañías mexicanas interesadas en invertir en programas de salud o mejorar los que ya aplica, arrancó con dos empresas en julio del 2010 y en 20 meses de trabajo ha logrado agremiar a 84 firmas.
Para Ángeles De Gyves, directora general del Consejo, esto es muestra evidente del interés cada vez mayor por parte de los mandos empresariales respecto de la salud de los empleados, aunque destaca que los programas empresariales de bienestar deben migrar del enfoque correctivo al preventivo para reducir la prevalencia de enfermedades y los costos en las empresas.
“Cuidar la salud de los empleados siempre va a resultar mejor que recuperarla”, consideró.
Los gastos ocultos de una atención reactiva o correctiva en lugar de preventiva- son el ausentismo, la baja productividad, el presentismo e, incluso, el aumento en los costos de los seguros médicos, mencionó.
En cambio, dijo, atender la salud de los empleados cuando están sanos fortalece su lealtad con la compañía y retiene el talento, además de que los hace corresponsables del cuidado de su salud.
Un programa de bienestar, además, fortalece la reputación corporativa entre los grupos de interés y ante la opinión pública; también facilita la obtención de reconocimientos como empresa responsable en el ámbito de los derechos laborales; un ejemplo: el Pacto Mundial considera ese tema como uno de sus cuatro pilares.
DIAGNÓSTICO LABORAL
Las empresas se asocian al Consejo a través de una membresía, cuyo costo depende del número de empleados, explicó De Gyves; con las socias se trabajan 10 líneas, como evaluaciones integrales de salud para los empleados y programas educativos.
El Consejo, lanzado de manera oficial en mayo del 2011, aglutina a 108,000 trabajadores de 84 empresas, mientras que para el cierre del año se prevé que sean 100 socias.
NO SE EQUIVOQUE
Al implementar un programa de bienestar considere fundamentales las siguientes estrategias:
Medir. Los datos son la clave, por lo que debe conocerlos: ausentismo, productividad por empleado, costo de perder un talento.
Implementar evaluaciones de riesgos de la salud de los empleados. Evaluar a los trabajadores le dirá qué programa necesita y permitirá proyectar los costos.
Encontrar las mejores prácticas e implementarlas. No repetir los errores sino aprender de ellos le ahorrará tiempo y dinero.
Enfocarse en el retorno de inversión (ROI). Aprenda a medir el ROI, considere beneficios en la imagen de la compañía y posibles exenciones de impuestos para el programa. Todo esto le permitirá hacer sostenibles sus programas de bienestar.
Hacer de su proveedor de seguros su socio. Identifique qué está aumentando las primas y oriente sus programas adecuadamente.
Fuente: Aon Hewitt y Consejo Empresarial de Salud y Bienestar.
Fuente: ElEconomista.com.mx
Por: Alejandra Aguilar.
Publicada: 21 de febrero de 2012.