Mientras América Latina avanza en temas de derechos sexuales y reproductivos, en EE.UU borran 50 años de derechos de la mujer. De acuerdo con The New York Times, el fallo, confirmado el viernes 24 de junio, tendrá implicaciones de gran alcance para el futuro social y político de los estados, así como para millones de mujeres estadounidenses.
En un hecho histórico, la decisión de la Corte Suprema para derogar la protección federal al derecho al aborto en el país, confirmó los temores que ya anunciaban esta decisión, tras la filtración en mayo de un borrador.
La noticia ha derivado en una ola reaccionaria tanto de celebraciones y como de protestas por parte activistas sociales y políticos, lo anterior demuestra cuán controvertido sigue siendo el tema de interrumpir una gestión, después de décadas de batallas ideológicas y morales intransigentes entre quienes ven la decisión como un derecho y aquellos que la contemplan como quitar una vida.
50 estados, 50 leyes de aborto diferentes
Con la decisión, se reanuda el debate sobre los derechos reproductivos de las mujeres, pese a que en 1973, el dictamen del caso Roe contra Wade parecía haber asentado que la Constitución de EE.UU. protegería la libertad de una mujer embarazada para elegir abortar sin excesivas restricciones gubernamentales.
En aquel tiempo, el Tribunal Supremo dictaminó que este derecho no es absoluto, y que debe sopesarse con los intereses del gobierno en la protección de la salud de la mujer y de la vida prenatal. Aunque, el juicio Roe Wade reconfiguró la política, hoy, el futuro se muestra sombrío y podría llevar algún tiempo en resolverse.
De acuerdo con Katherine Drabiak, profesora adjunta en la Facultad de Salud Pública y Facultad de Medicina de la Universidad del Sur de Florida. Con la ley Roe anulada, no solo se borran 50 años de derechos de la mujer, sino que 20 estados prohibirán o restringirán los abortos, mientras que 20 más y el Distrito de Columbia protegerán, o incluso ampliarán, la capacidad de una persona para obtener un aborto seguro. Lo que deja a diez estados con un panorama incierto.
«El fallo podría ser solo el punto de partida para que los estados naveguen por una amplia gama de nuevas leyes de aborto».
Borran 50 años de derechos de la mujer
Concretamente, el caso que llegó hasta el tribunal y que dirimió en dejar en manos de cada uno de los 50 estados de la nación, el redactar sus propias leyes sobre la materia, fue el de Dobbs contra Jackson Women’s Health Organization. Esta última, una clínica de abortos en Mississippi que se opuso a los esfuerzos estatales para prohibir el aborto después de 15 semanas.
Con una votación de seis a favor y tres en contra, la noticia de que se borran 50 años de derechos de la mujer, derivó en un aumento de protestas a fuera de la Suprema Corte, junto a pequeños grupos de activistas antiaborto que celebraban. Multitudes se derramaron en las calles de grandes ciudades como Los Ángeles, Chicago y Filadelfia.
Por su parte, en una de sus declaraciones, el juez Samuel Anthony Alito sostuvo que la ley Roe lejos de lograr un consenso nacional sobre el aborto, han profundizado la división: «Es hora de hacer caso a la Constitución y devolver el tema del aborto a los representantes electos del pueblo».
Retroceden derechos de las mujeres en EE.UU.
De acuerdo con los especialistas, la decisión ha dejado preguntas importantes sin respuesta. Una de ellas corresponde a si la Constitución exige excepciones a las prohibiciones del aborto para la vida o la salud de la madre, las víctimas de violación o incesto o para discapacidades fetales.
Al respecto, se señala que tales restricciones podrían resultar en 60,000 nacimientos al año a causa de esta política. Cabe señalar que solo en 2019, se estimó que alrededor del 57% de mujeres de 20 años representaban la mayoría de solicitudes de abortos, siendo las personas afroamericanas la tasa más alta: 27 por cada 1,000 mujeres, en edades de 15 a 44 años.
Por su parte, los estados y ciudades gobernados por demócratas se han comprometido a defender el derecho al aborto y dar la bienvenida a las personas de los estados vecinos con prohibiciones. En tanto, los liderados por republicanos han trabajado para restringir aún más el aborto. Algunos han debatido enjuiciar a las mujeres que busquen este servicio bajo los estatutos de homicidio.
La iniciativa que pone fin al aborto podría suprimir los esfuerzos por defender los derechos de las mujeres y niñas a lo largo de la historia. Colocando en manos de terceros la decisión del derecho constitucional de las estadounidenses sobre sus cuerpos.
