La Tierra se está calentando rápidamente como resultado de las emisiones provocadas por las actividades humanas. Entonces, ¿qué se está haciendo al respecto? Organismos internacionales como la ONU han llamado a la descarbonización y la transición a las energías limpias para evitar que la temperatura del planeta suba más de 2ºC.
Ante esta crisis ambiental, el multimillonario tecnológico, Bill Gates, quiere bloquear el Sol, de acuerdo con información compartida por Forbes. Para los defensores de la llamada geoingeniería solar, como Gates, una respuesta para frenar el deterioro está en considerar las técnicas destinadas a neutralizar una parte de la radiación solar. ¿De qué va exactamente la iniciativa?
Bill Gates quiere bloquear al Sol
El filántropo y cofundador de Microsoft está financiando el desarrollo de una tecnología destinada a interrumpir cierta cantidad de la radiación solar que impacta a la atmósfera. El proyecto dirigido por la Universidad de Harvard, en teoría, creará un efecto de enfriamiento global.
Conocido como Experimento de Perturbación Controlada Estratosférica (SCoPEx) —de acuerdo con Nature en 2018—, el concepto en un sentido amplio está diseñado para rociar partículas en la estratosfera, que puedan enfriar el entorno al reflejar algunos de los rayos solares.
Geoingeniería contra cambio climático
Desde hace tiempo, la investigación generalizada sobre la eficacia de la geoingeniería solar se ha estancado debido a la controversia. Los opositores creen que dicha ciencia conlleva riesgos impredecibles, incluidos cambios extremos en los patrones climáticos no muy diferentes a las tendencias de calentamiento, que ya estamos presenciando.
De manera similar, los ambientalistas temen que una transformación dramática en la estrategia de mitigación, sea tratada como una luz verde para continuar emitiendo gases de efecto invernadero, con pocos o nulos avances en los patrones actuales de consumo y producción.
¿Podría perturbarse el clima?
Si bien, parece una trama de ciencia ficción, la iniciativa de Bill Gates que quiere bloquear al sol, SCoPEx, dará un paso adelante en su investigación inicial cerca de la ciudad de Kiruna, Suecia. La Corporación Espacial Sueca acordó ayudar a lanzar un globo que transporta equipo científico a 12 millas (20 km) de altura.
El lanzamiento no liberará ningún aerosol estratosférico, más bien, servirá como prueba para maniobrar el dirigible y examinar a las comunicaciones y los sistemas operativos. De tener éxito, podría ser un paso hacia una segunda etapa experimental que liberaría una pequeña cantidad de polvo de CaCO 3 a la atmósfera.
La efectividad de esta maniobra ha sido documentada por David Keith, profesor de física aplicada y política pública en la Universidad de Harvard, junto con sus colegas científicos de SCoPEx, quienes publicaron un artículo, en 2017, que sugiere que el polvo en realidad podría reponer la capa de ozono al reaccionar con moléculas que destruyen el ozono.
Pero, se desconoce la cantidad exacta de CaCO 3 necesaria para enfriar el planeta. Y los científicos tampoco pueden confirmar si es el mejor aerosol para realizar el trabajo.
Daños colaterales de la propuesta de Gates
Sin un conocimiento certero sobre los riesgos colaterales de perturbar el clima global, el experimento podría traer consecuencias no deseadas, impactando negativamente en regiones altamente pobladas y generando otra crisis de refugiados.
Keith ha propuesto la creación de un «grupo de riesgo» para compensar a las naciones más pequeñas por los daños no especificados de tales pruebas, que quizás resulte de poco consuelo para aquellos desplazados por las condiciones inhabitables.
Si bien las acciones parecen desesperadas por contener el calentamiento global, se requiere la cooperación internacional para evaluar riesgos y resultados positivos y negativos de cualquier iniciativa pionera.
