En 1998 no había duda sobre el nombre del campo «responsabilidad social corporativa». El término se decía fácilmente y además venía con un muy útil acrónimo de tres letras que era muy fácil de recordar: RSC. Pero otros términos comenzaron a filtrarse; cuatro años antes, John Elkington ya había propuesto Triple Bottom Line (o resultado final triple, refiriéndose a la gente, el planeta y las ganancias), una expresión que incluye problemas ambientales no contemplados en la RSC y que además, gracias a las palabras «resultado final» se entiende más como una práctica de negocios y no filantrópica. ¿Quién podría quejarse de eso?
Pero el Triple Bottom Line tiene algunos problemas: por ejemplo, deja fuera la gobernanza, la cuál cada vez entendemos como el motor de casi todos los aspectos del desempeño corporativo, incluyendo las ganancias y el impacto económico. Por lo tanto, ¿no podría esta palabra reemplazar a «ganancias» en los tres términos de TBL? ¿o esto significa que deberíamos hablar de un «resultado final cuádruple»? ¿Y si se pone de moda otra palabra le diríamos entonces «resultado final quíntuple»?
Después llegó «sustentabilidad«, un concepto dinámico y versátil que no se limita a simplemente nombrar categorías. La sustentabilidad sugiere un proceso activo que enfatiza la planeación, la inversión y el desempeño a largo plazo, además de incluir a todos, no sólo a corporaciones. La sustentabilidad nos dice en términos claros que tenemos que vivir y trabajar en el planeta de forma que los recursos humanos y físicos no disminuyan para las siguientes generaciones. ¿El término perfecto?
Realmente no. Para empezar, en Europa se usa como un término que engloba todo el sector mientras que en Estados Unidos la mayoría lo usa para indicar problemas ambientales, lo cual genera confusión. Además, es una sola palabra, por lo que si no sabes lo que significa, simplemente estás perdido. Otro problema es que no tiene una definición en la que todos podamos estar de acuerdo. «Sustentabilidad» no le dice nada a las nuevas generaciones, porque no es una llamada a la acción y finalmente, su versatilidad la hace también demasiado genérica.
Así que si ni la RSE ni el Triple Bottom Line ni sustentabilidad funcionan, tal vez regresar a la básico. Tal vez simplemente decir RC: Responsabilidad corporativa. Sin embargo, al quitar lo social de nuevo quedamos en un terreno poco específico y al resaltar lo corporativo se quedan fuera la sociedad civil y las ONG.
Más recientemente se comenzó a enfatizar la palabra «Global», en términos como «Ciudadanía Corporativa Global«, un término que se refiere al esfuerzo comunal que todos debemos hacer, además de cambiar la aburrida «responsabilidad» por «ciudadanía», implicando que se tienen derechos además de obligaciones. Sin embargo, es mucho más complicado de decir y recordar y todavía queda el problema de lo «corporativo».
Entonces, si después de tantos años ningún término se ha establecido como el común: ¿es momento de elegir uno y aceptar sus limitaciones, o de esperar a que surja uno perfecto?
Fuente:
GreenBiz
Traducción y adaptación:
María José Evia Herrero
Llamémosle como queramos, pero tengamos claro por qué, con quién y para qué lo hacemos. Y hagámoslo.
Les comparto una fábula que puede resultar interesante.
Tomás de Iriarte (1750-1791) ha pasado a la historia por sus fábulas. Destaca entre ellas ésta que títuló “Los dos conejos”.
Por entre unas matas,
seguido de perros,
no diré corría,
volaba un conejo.
De su madriguera
salió un compañero
y le dijo: «Tente,
amigo, ¿qué es esto?»
«¿Qué ha de ser?», responde;
«sin aliento llego…;
dos pícaros galgos
me vienen siguiendo».
«Sí», replica el otro,
«por allí los veo,
pero no son galgos».
«¿Pues qué son?» «Podencos.»
«¿Qué? ¿podencos dices?
Sí, como mi abuelo.
Galgos y muy galgos;
bien vistos los tengo.»
«Son podencos, vaya,
que no entiendes de eso.»
«Son galgos, te digo.»
«Digo que podencos.»
En esta disputa
llegando los perros,
pillan descuidados
a mis dos conejos.
Los que por cuestiones
de poco momento
dejan lo que importa,
llévense este ejemplo.
Un abrazo