Hasta hace algunos años quedarte dormido en tu escritorio seguramente habría sido un motivo, si no de despido, por lo menos de una fuerte sanción por parte de tu jefe; eso por no mencionar que se traduciría en un momento realmente embarazoso, así que no es extraño que en medio del cansancio hayas recurrido alguna vez a una extensa terapia de cafeína y azúcar o hayas inventado algún otro creativo remedio para mantener los ojos abiertos frente a tu computadora. Aunque ¿sabías que esta práctica es cada vez más aceptada en las organizaciones?
Tal como leíste, dormir una siesta en la oficina sin preocupaciones no solo es saludable para los trabajadores, sino también podría tener beneficios de rentabilidad para las empresas. De acuerdo con un artículo publicado por Christopher Lindholst en Entrepreneur, un empleado descansado es mucho más productivo, por lo que tiene sentido para los empleadores permitir que su equipo descanse adecuadamente, incluso si esto significa tomar unos minutos en horario de oficina.
A través de esta publicación, el CEO de MetroNaps compartió también algunas de las razones por las que un empleador inteligente y responsable debería promover un descanso adecuado a través de la creación de políticas más flexibles dentro de la oficina, mostrando que seguramente estaría de acuerdo con el humor con el que Richard Branson, CEO de Virgin, cuando sorprendió a un joven durmiendo en horas de trabajo mientras visitaba las oficinas de la marca en Australia, el pasado mes de Junio.
¿Quieres averiguar si las razones descritas por Lindholst te sirve como argumento para convencer a tu jefe de permitirte una siesta? Si no es así, quizá sirvan para jugar a tu favor si alguna vez te quedas dormido durante una importante visita o mientras tu jefe se encuentra en la oficina.
Pocos duermen bien en casa
La mayoría de los adultos necesitan alrededor de ocho horas de sueño al día para ser felices, estar sanos y ser productivos, sin embargo de acuerdo con un estudio realizado por National Sleep Foundation, cerca de la mitad de los trabajadores estadounidenses dicen que la falta de sueño por la noche afecta sus actividades diarias.
Si vives en la Ciudad de México, eres madre o padre, o simplemente tu empleo es tan demandante como la mayoría, seguramente esta cifra no te resulta para nada ajena, por lo que estarás preguntándote cuándo fue la última vez que pudiste dormir la cantidad de horas recomendada.
Según Lindholst, todo esto puede resolverse con una siesta rápida de 20 o 30 minutos, misma que podrá incrementar de manera rápida su productividad e incluso ayudarte a dormir mejor durante la noche.
La ciencia respalda las siestas
Existe una gran cantidad de evidencia científica que respalda la siesta como una herramienta útil para estimular el desempeño de los empleados; según refiere Lindholst algunos estudios sugieren que un descanso de alrededor de 10 minutos ayuda a incrementar la actividad cerebral, mejorar la concentración e incluso reducir el riesgo de enfermedades.
Por su parte, un estudio realizado por la Universidad de Michigan en 2015 asegura que dormir entre 20 y 60 minutos a la mitad de la jornada, incrementa la concentración y estimula la creatividad. Muchas empresas quizá argumentarían que destinar una hora a la siesta es demasiado, sin embargo la doctora Guadalupe Terán, de la Clínica de Trastornos del Sueño de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) asegura que en México es común encontrar jornadas laborales de hasta 12 horas durante las que las personas dejan de ser productivas y comienzan a perder el control de sus sentidos.
Dormir para permanecer alerta
Las siestas en la oficina no solo pueden mejorar la productividad y la eficiencia de los trabajadores. Una investigación realizada en el Departamento de Veteranos del Hospital de Northport en Nueva York ha concluido que una sesión de sueño corto puede mejorar el funcionamiento cognitivo y el estado de alerta, lo que reduce hasta un 30% el riesgo de fallas de atención y resulta especialmente valioso en entornos en los que la seguridad es importante.
Lindholst refiere también que algunos investigadores de la Universidad de Harvard estiman que la falta de sueño cuesta a la economía estadounidense aproximadamente 63.2 millones de dólares al año en pérdida de productividad, lo que podría reducirse considerablemente si las empresas consideraran revisar sus políticas y hacerlas más flexibles.
De ahí que cada vez más empresas norteamericanas y de todo el mundo se encuentren preocupadas por descubrir de primera mano los beneficios de permitir a sus colaboradores descansar adecuadamente. Compañías como Google, Uber, Salesforce, The Huffington Post y Ben & Jerry , entre otras ya han comenzado incluso a instalar salas especiales, mientras que la aseguradora Aetna incluso ha comenzado a pagar a sus trabajadores por dormir, en un esfuerzo por impulsarlos a dar la importancia necesaria a su descanso.
