El Laboratorio Nacional de Prevención y Control del Dopaje (LNPCD) se encuentra suspendido, debido a fallas en sus procesos.
Desde hace unos años, México incluyó, durante el sexenio de Vicente Fox, la medida de contar con el Laboratorio, avalado por la Agencia Mundial Antodipaje (AMA), pero esto ha tenido un camino difícil por las fallas que ha tenido.
Durante el 2000 y 2006, la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade) fue dirigida por Nelson Vargas, se conformó el Comité Nacional Antidopaje (CNA), y aumentó el número de controles a los deportistas.
Se pasó de 697 exámenes en el 2000 a 3mil en 2006 y se dio origen a la cartilla antidopaje.
“Tuvimos contacto con AMA, nos exigía ciertas cosas para certificar el laboratorio. Nunca lo pudimos hacer por falta de dinero, había que comprar más equipos, cumplir protocolos”, cuenta Vargas.
En abril de 2009, Bernardo de la Garza dirigió la Conade, hubo trámites y controles que se siguieron, además se hizo la compra de equipo pero hubo yerros: exámenes mal realizados y dopajes en la delegación mexicana de Centroamericanos y del Caribe (JCC) de Mayagüez 2010.
En 2011, México no pudo obtener la certificación del laboratorio para los Juegos Panamericanos de Guadalajara y contrató al de Barcelona.
En 2013, Jesús Mena empezó a dirigir la Conade y logró la certificación, pero esto duró tres años porque la AMA suspendió, otra vez, la certificación.
En ese lapso, México invirtió 52.9 mdp y obtuvo 8.39 mdp por cobro de pruebas, además padeció para pagar los sueldos exigidos por AMA, en algunos casos superiores al del director de la Conade.
Previo a los juegos Olímpicos de Río 2016 se arrojó un resultado positivo de la esgrimista Paola Pliego, quién después su grupo de abogados demostró que ya no existía y se levantó la sanción. Paola no pudo competir en Brasil.
“Es difícil que digan que te dopaste, te vuelves paranoica. Y, además, de que fue en tu país, vivía en las nubes y me consideraba la niña con más suerte en el mundo; nunca me imaginé. Fue el golpe más grande”, declara Pliego.
Después de ese hecho, el laboratorio mexicano recibió una suspensión provicional y la Conade no ha dado explicaciones.
En años recientes, había decaído también el número de exámenes antidopaje que se realizaron en México, a pesar de contar con el aval, y los problemas se agravan porque la AMA también advirtió en 2015 que la Conade, como ministerio del deporte, no podía ser juez y parte.
Conade presupuestó 23 millones 230 mil pesos este año para recuperar su estatus internacional.
Nelson Vargas dice que el laboratorio debe volverse a impulsar, a pesar de las malas experiencias: “Es como si tienes tu casa llena de Mercedes Benz último modelo y no los usas, ¿los vendes? No es posible que Colombia o Cuba sí tengan su laboratorio certificado por AMA. No podemos quedarnos rezagados”.
