En el marco del “Encuentro 1: Ciclo de Desayunos de Responsabilidad Social” organizado por Kolektor, dialogamos con Silvina Vazón (Subdirectora de RSE y Gestión Institucional de Río Uruguay Seguros), Guillermo Bustamante Sierra (Representante del Club de Empresas Comprometidas) y Lucas Utrera (Especialista en RSE y Profesor de UADE Business School).
En su encuentro con IARSE, los disertantes de la jornada expusieron los principales conceptos y opiniones en torno a los Derechos Humanos, la Igualdad y la Equidad dentro de las organizaciones.
Silvina Vazón – Subdirectora de RSE de Río Uruguay Seguros
¿Cómo está organizada la gestión de la Responsabilidad Social Empresaria en Río Uruguay Seguros?
La gestión de la Responsabilidad Social Empresaria es un proceso estratégico para Río Uruguay Seguros. Esto significa que depende directamente del cuerpo de Gobierno de la empresa – que en nuestro caso es el Consejo de Administración – y puntualmente de nuestro Presidente. El delega decisiones de Responsabilidad Social en una Subdirección de RSE para que haga un seguimiento y coordine todas las actividades y el desarrollo de la RSE en toda la organización. Lo destacable y diferente es que esta Subdirección no tiene personal a cargo, es decir que no hay una estructura avocada específicamente a las actividades de Responsabilidad Social; sino que la Subdirección coordina en forma general todos los equipos internos que hay, que trabajan para la mejora de la calidad de vida del público interno y la comunidad. De esta manera, se logra que la Responsabilidad Social sea transversal a la organización.
¿Qué es la Guía de Derechos Humanos del Pacto Global de Nacional Unidas? ¿Por qué decidieron acompañarla desde Río Uruguay Seguros?
Al hablar de que nuestra empresa es una empresa de la Economía Social y tiene principios y valores que arrancan con su constitución como empresa cooperativa, se marca un rumbo de compromiso con la comunidad. En el centro de nuestra Estrategia de Responsabilidad Social Empresaria están los Derechos Humanos, son el centro de nuestras prácticas hacia adentro y hacia afuera; y hay un fuerte compromiso como empresa firmante del Pacto Global que nos hace comprometer no solo en cumplir con los Derechos Humanos, sino también con Derechos Laborales, con la lucha contra la corrupción, con la protección del medio ambiente.
Todo esto nos llevó a apoyar la Guía de Derechos Humanos, que intenta ser un elemento práctico para que el empresariado pueda tomar algunas ideas y ver cómo se llevaría a la práctica un enfoque de la empresa en el plano de los Derechos Humanos.
¿La Guía cuenta con herramientas para la medición de la política de Derechos Humanos de las organizaciones?
Sí. La Guía cuenta con una primera sección que tiene un enfoque más bien teórico, donde conceptualiza y define los Derechos Humanos y su utilidad, recapitula las iniciativas globales, desarrolla los Objetivos del Milenio que plantea Pacto Global, entre otros; para luego entrar en una segunda sección con un abordaje más específico para el enfoque empresarial del tema de los Derechos Humanos.
Además, en un anexo brinda una herramienta para hacer un diagnóstico de cómo está la empresa en estos temas y a la vez cita espacios y páginas web donde se pueden consultar diferentes indicadores, como los GRI o Ethos.
¿Qué políticas están desarrollando desde Río Uruguay en relación a la temática de los Derechos Humanos?
Estamos haciendo muchas cosas, porque en realidad los Derechos Humanos tienen que ver y atraviesan muchas dimensiones de la organización: Cuando trabajamos con la prevención de la salud estamos trabajando con Derechos Humanos, cuando no discriminamos a nuestro personal estamos respetando los Derechos Humanos, cuando protegemos la vida con programas de seguridad vial estamos preservando al capital humano, cuando alentamos proyectos de las Organizaciones de la Sociedad Civil también nos adentramos en la temática.
Por ejemplo, junto a la Universidad Tecnológica Nacional en Concepción del Uruguay, hemos desarrollado una biblioteca para no videntes. Se llama “Voces” y tiene los libros digitalizados, gracias al aporte conjunto de una Asociación de personas con discapacidad visual, la Universidad, el Municipio y una empresa privada como Río Uruguay Seguros.
Actualmente, además, estamos empleando a un joven con Síndrome de Down. Todos estos son pasos que nos ayudan a cumplir nuestro objetivo de promover y promulgar el respeto a los Derechos Humanos y la igualdad.
Guillermo Bustamante Sierra – Club de Empresas Comprometidas
¿Podrías explicarnos qué es el Club de Empresas Comprometidas?
El Club de Empresas Comprometidas es una organización sin estructura, en la que buscamos principalmente nuclear a empresas pero también involucrar a ONGs y a Estado – tanto Municipal, como Provincial y Nacional – con el fin de promover la inclusión de personas con discapacidad en el ámbito laboral.
¿Cuáles son las principales consultas que actualmente reciben por parte de las empresas?
Creo que la principal consulta tiene que ver con acceder a un mayor conocimiento sobre la temática. No saber, querer acceder a una primera aproximación, cómo hacer para incorporar y emplear a personas con discapacidad… Es algo como “A esto no lo conozco, está fuera de mi alcance ¿Qué es? ¿Cómo es? Vengan a contarme cómo puede hacer para poder incluirlos dentro de mi empresa el día de mañana” y está bien que así sea, porque una mala experiencia puede cerrar puertas.
Entonces es bueno prevenir y ver que por hacer una buena acción, no terminemos haciendo un mal a la persona y a la empresa. Una mala experiencia seguro cierra las futuras incorporaciones, pero con nuestra tarea de contar experiencias y el acercamiento de nuestro conocimiento creemos que podemos prevenir y ayudar en este proceso.
¿Cuál es tu recomendación para aquellas empresas que están analizando la posibilidad de incorporar personas con discapacidad a su staff?
Primero que nada, es necesario conocer sobre la temática. El conocimiento ayuda a bajar un montón de prejuicios o preconceptos.
Después es muy importante hacer un correcto análisis de puesto, y el foco de todo esto es preguntar qué puede hacer la persona. Cualquier proceso de selección se centra en lo que la persona puede hacer; si hacemos un proceso de selección basado en lo que la persona puede hacer para una vacante particular no va a haber ningún problema, porque se está siguiendo un proceso más allá de su discapacidad o capacidad y no focalizándose en la características personales.
¿Cuáles son las futuras iniciativas o proyectos a seguir por parte del Club de Empresas Comprometidas?
Estamos trabajando mucho en vinculación empresaria, base de datos y comunicación. Las cuestiones más visibles tienen que ver principalmente con la comunicación: Estamos terminando nuestra página web, ya está activo el Facebook Club de Empresas Comprometidas Córdoba y activo un portal exclusivo para que las personas con discapacidad puedan subir sus Currículums estén actualizados sobre las novedades. Todo esto a la vez nos va a permitir una retroalimentación de la base de datos, para generar un pool de candidatos que esté disponible para cuando las empresas quieran dar ese paso y animarse a incorporarlos.
Lucas Utrera – Especialista en RSE
¿Cuál es el rol de las empresas en la promoción y defensa de los Derechos Humanos?
Justamente la idea de la presentación fue reflexionar qué significan los Derechos Humanos para las empresas, y en función de eso hacer un foco en temas vinculados a la inclusión y la diversidad. Fuera de ese foco, lo interesante es analizar de qué manera la empresa toma en consideración sus procesos y sus operaciones para en función de eso detectar cualquier riesgo de vulneración de los Derechos Humanos, ya sea hacia una persona, un grupo o una comunidad para poder tomar medidas preventivas y evitarlas. Ese es el rol de las empresas, respetar los Derechos Humanos de las personas y evitar cualquier vulneración de los mismos.
Entonces, creo que la temática de la presentación – Derechos Humanos y Empresas – resume el esfuerzo que vienen realizando las organizaciones en pos de mitigar riesgos y promover el desarrollo de los individuos, sintetizándolo bajo una misma cosa, que son los Derechos Humanos e incluye todo: Derechos Laborales, Derechos Personales, Comunidad, Medio Ambiente, entre otros.
¿Vislumbras algún tipo de tendencia o patrón que están siguiendo las empresas en torno a la temática de los Derechos Humanos?
Creo que esto tiene que ver con los instrumentos que las empresas están utilizando actualmente: Por un lado el Informe Ruggie y la ISO 26000, que están alineados; y aquellas empresas que están trabajando con el GRI. En ese sentido los procesos de reporte y los instrumentos que toman las empresas para desarrollar sus Estrategias de RSE están alineados en ese punto. Después, por supuesto, encontramos todo el abordaje que hace la OIT en términos de Derechos Laborales; y la Convención de Naciones Unidas y todas las Convenciones dentro de su sistema. Eso es el marco de referencia a considerar. Luego, todo esto se canaliza en legislación nacional, provincial y local y en políticas públicas.
¿Qué recomendaciones darías a empresas que quieren comenzar a desarrollar políticas o programas vinculados a los Derechos Humanos?
El recorrido lógico es analizar los procesos internos y tener en cuenta, tomando el Informe Ruggie e ISO 26000, GRI, PLARSE o cualquier otro indicador disponible analizar cómo se encuentra mi empresa frente a determinadas situaciones. Deben plantearse interrogantes: ¿Cómo estoy? ¿Estoy haciendo algo o no estoy haciendo nada en relación a la temática? ¿Me interesa realmente? ¿Quiero hacerlo? ¿Tengo algún riesgo en caso de no hacerlo? En función de eso, tomo posteriormente la decisión.
Si bien hay un marco prescriptivo, en última instancia termina siendo una decisión de la empresa. Lo interesante es que, más allá de avanzar con una política de Derechos Humanos, se avance en el plano operativo y se realice balance de la gestión para evitar vulneraciones y garantizar el respeto a los Derechos Humanos.
Para terminar, ¿podés adelantarnos algo sobre tu nuevo libro?
El libro saldrá en breve, y se llama “La RSE y sus Mitos: Manual para Refutar a Ingenuos y Escépticos”; y en realidad lo que hace es recopilar todas aquellas frases que uno habitualmente escucha relacionadas a la RSE, como “La RSE son las donaciones que hacen las empresas” o “Nuestra empresa en los 70’ no operaba ¿Qué tengo que ver con los Derechos Humanos?” como una excusa para cuestionarlos y desarrollar los principales conceptos vinculados a la temática.
Creo que recopila todo lo que significa una Gestión Sustentable, y a través de estos “mitos” se hace más dinámico y divertido. Espero que realmente sirva y que brinde herramientas a las empresas y personas para poder bajar los conceptos al plano operativo.
Fuente: IARSE.