• Grupo Modelo ha impulsado desde 2001 la restauración ecológica con la plantación de 442,804 árboles de pino en el Parque Nacional Izta-Popo Zoquiapan
• El Programa «Juntos por la Conservación» ha logrado captar 834,026 m3 de agua y recargar acuíferos, además de capturar 1,330 toneladas de CO2eq por año
A partir de 2001 Grupo Modelo ha desarrollado en conjunto con Pronatura México un modelo de conservación para espacios prioritarios en nuestro país. Un sitio clave por su gran relevancia histórica, cultural, ambiental e incluso social es el Parque Nacional Izta-Popo Zoquiapan, el cual se convirtió en área de protección ambiental por un Decreto Presidencial en el año 1935. Los volcanes Iztaccíhuatl y Popocatépetl están cubiertos por una capa de nieve que se acumula nevada tras nevada hasta convertirse en hielo compacto, dando origen a los glaciares de alta montaña; este deshielo de los glaciares y la abundante precipitación de la zona (más de 1,000 mm anuales) generan corrientes superficiales y alimentan los acuíferos subterráneos que abastecen en gran medida las necesidades de ciudades cercanas a su majestuosa presencia, como lo es la Ciudad de México.
El Parque Nacional Izta-Popo Zoquiapan es sumamente importante, ya que en sus inmediaciones predominan los bosques de coníferas, oyameles y árboles de pino. Colindando con las nieves perpetuas se ubica el pastizal alpino o pradera de alta montaña. Además existe la presencia de hongos, plantas medicinales y aromáticas. En el Parque se distribuyen 465 especies faunísticas de las cuales 23 son endémicas y 30 se encuentran en alguna categoría de riesgo, como son el teporingo y zacatuche, también conocido como conejo de los volcanes; la víbora de cascabel y el alicante del Popocatépetl. Desafortunadamente, el crecimiento de la mancha urbana se ha dado en forma desordenada y esto ha propiciado que los asentamientos humanos, la agricultura y la ganadería se expandan rápidamente a costa de los bosques, adicional a la explotación desmedida de recursos naturales mediante tala clandestina, caza furtiva y presencia de plagas forestales que ocasionaron el deterioro del Parque.
Durante estos doce años de trabajo conjunto entre Pronatura México y Grupo Modelo en el Programa «Juntos por la Conservación», se han desarrollado modelos de conservación de bosques templados cuyas acciones atienden, y en algunos casos revierten, la tendencia de deterioro del Parque Nacional. Estas acciones han permitido establecer en un proceso de restauración ecológica 668.21 hectáreas de bosque, con la plantación de 442,804 árboles de pino y un índice de supervivencia de hasta el 42% de esta plantación.
Estos grandes logros permiten contar al día de hoy, con un espacio definido delimitado de bosque con una densidad de 611 árboles por hectárea. Adicional a este trabajo de restauración se ha reforzado con esfuerzos para detener la pérdida de suelo con la habilitación de 27,505 tinas ciegas que permiten obtener un azolve de 77.36 m3 de suelo. Las tinas ciegas han logrado captar 834,026 m3 de agua pluvial y recargar con este líquido los acuíferos subterráneos que se nutren principalmente del deshielo que se ha hecho mención.
Por otro lado, el bosque restaurado que se encuentra bajo el manejo de Pronatura México tiene un potencial de captura de carbono de 1,330 toneladas de CO2eq por año, y transforma este esfuerzo de conservación en un beneficio colateral en el combate al Cambio Climático.
Toda esta voluntad e ímpetu se coronan con el involucramiento de la ciudadanía en las acciones de conservación con la implementación de infraestructura de recreación en módulos educación ambiental en el Parque. Fomentar la cultura y conciencia ambiental en los visitantes se resume en la posibilidad de compartir información de gran valor y reflexión en senderos interpretativos como el que se ubica en el lomerío del Yolotxóchitl o el Mirador de «La Joya» que nos permiten disfrutar de escenarios majestuosos de la riqueza natural de nuestro país.
No menos importante ha sido el desarrollo de otros módulos como el espacio que refiere a un Vivero Educativo, donde se representa de manera lúdica y didáctica todo el proceso para producir en condiciones propicias toda la planta que se canaliza a los esfuerzos de conservación. Otro módulo de gran relevancia es «El Caracol» espacio de accesibilidad total, primero en todo el país dentro de un Área Natural Protegida, el cual permite a personas con alguna discapacidad motriz acercarse y vivir una experiencia con el bosque al adentrarse en él.
Todos estos logros y avances en la conservación, pero sobre todo el camino que se ha andado y la satisfacción de ver un espacio emblemático y restaurado, no podría ser posible sin el apoyo y contribución que Grupo Modelo ha impulsado y dado seguimiento desde 2001 con el único fin de hacer crecer a nuestro país “Juntos por la Conservación”.
Comunicado de Prensa
