Buscar trabajo pidiendo a Dios no encontrar es un refrán popular… que se vuelve tangible en la experiencia de algunos empleadores.
Y es que colocar a un adulto mayor en un empleo formal, aun superando el obstáculo de la discriminación, presenta otras dificultades.
«Con los adultos mayores estoy de acuerdo que existe discriminación, pero a veces no es tan fácil que acepten un empleo, aun cuando las empresas socialmente responsables abran oportunidades», comenta Abigail Huerta, reclutadora que ha trabajado para varias empresas de outsourcing.
«Les concertas cita aunque no tengan experiencia, rechazan las prestaciones porque les quitan pensión y ayudas del Gobierno, entonces se negocia para que los contraten por honorarios», explica Huerta, «pero luego argumentan sobre las distancias, cuando hay varias sedes les buscas el lugar más cercano, también dicen que no pueden trabajar tantas horas y entonces te preguntas si leyeron el anuncio donde se explica el puesto… al final e la aplican y dicen que luego te llaman».
Con cinco años de experiencia, la empleadora también tiene ejemplos entre adultos jóvenes.
A pesar de publicar en «negritas» el salario y las especificaciones del puesto, muchos de ellos llegan a pedir cualquier otra cosa… menos lo que fue ofertado.
«Incluso te dicen que sí vieron el anuncio, pero pensaron que, tras la entrevista, se les iba a ofrecer un puesto completamente diferente y un sueldo más alto».
Aunque pedir cierto rango de edad puede parecer discriminatorio, en algunos casos no se puede soslayar, ya que el perfil del puesto lo requiere, puntualizó Huerta.
Sin embargo, delimitar por la edad puede ser también un problema de falta de visión, de acuerdo con expertos.
«Por una parte, le niegan la oportunidad a la gente que acaba de terminar sus estudios y, por otro lado, cuando la gente tiene 40 años, a su edad más productiva, porque ya tiene experiencia, tampoco las contratan, es una falta de visión empresarial», opinó Alberto Arroyo, investigador de la UAM.
Oferta responsable
Las empresas que buscan afiliarse y ser reconocidas como Empresas Socialmente Responsables deben seguir determinadas normas de operación:
• Proteger los derechos humano de sus trabajadores.
• Respetar la elección de los trabajadores de afiliarse a un sindicato.
• Remunerar a los empleados con dinero y no en especie.
• No emplear a niños.
• Dar oportunidad a todas las personas con la capacidad para realizar el trabajo que demanda el puesto, sin basar la contratación en la edad, sexo o religión de las personas.
• Fomentar el cuidado al medio ambiente.
• Evitar la corrupción en todas sus formas.
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Me permito opinar sobre el tema,miren formo parte del grupo que aluden . Soy adulto mayor,actualmente me desempeño en el area de venta de inmuebles,estoy muy contento y tengo buenos resultados. Creo que mis contemporáneos deben ubicarse en la realidad de la vida. Nuestro tiempo ya pasó ,pero debemos seguir sintiendonos útiles para con uno y los que nos rodean,
Pero tambien,que NO EXAGEREN ccon cosas como LA UNIVERSIDAD DE LA TERCERA EDAD,eso mis amigos es puro cotorreo y una burla triste. Miren,que se rían de sus más cercanos.
Claro que debemos seguir leyendo,elevar nuestro nivel cultural,pero…… SIN MOFARSE. Saludos.