Después de que Volkswagen diseñara coches que camuflaban emisiones de contaminantes, el primero en ser detenido fue James Liang, un ingeniero de la firma que trabajaba desde hace más de 30 años en la empresa. Él, fue condenado por un tribunal en Detroit a un total de 40 meses de prisión por el desarrollo del sistema que permitió que se ocultara las emisiones de vehículos con motores diésel.
Desde hace tres años, el caso dieselgate sacude a la industria alemana del automóvil. Entre los involucrados se encuentra Audi, quien hasta hace poco no estaba en la mira de la justicia. Sin embargo, la marca se vio obligada a llamar a revisión a s 60 mil vehículos A6 y A7 tras el hallazgo de un «programa ilícito» capaz de falsear los niveles de emisión de gases contaminantes.
Los ingenieros de la marca son sospechosos de contribuir a la elaboración de los programas incriminados y por ello, desde hace tiempo está en la mira de la fiscalía de Múnich.
Asimismo, el presidente ejecutivo de Audi, Rupert Stadler, recientemente fue acusado por fraude y complicidad de emisión de falsos certificados y por ello, recientemente se dio a conocer que Stadler ha sido detenido. Se trata del directivo de mayor rango en ser arrestado.
Según la fiscalía de Múnich dijo que Stadler fue detenido porque los investigadores veían riesgo de destrucción de pruebas, asumiendo de nuevo a Volkswagen (VW) en una crisis de liderazgo.
Stadler fue detenido porque los investigadores veían riesgo de destrucción de pruebas.
Stadler fue detenido porque los investigadores veían riesgo de destrucción de pruebas.
Tras la noticia de la detención, el nuevo presidente ejecutivo del grupo, Herbert Diess, se encarga de renovar su estructura de liderazgo que incluye a Stadler, y acelera el cambio del grupo hacia los vehículos eléctricos tras el escándalo de las emisiones.
De acuerdo con un comunicado de la oficina fiscal de Múnich, “dentro de la investigación en el asunto del diésel y los motores Audi, la oficina del fiscal de Múnich ejecutó una orden de arresto contra el Sr. profesor Rupert Stadler el 18 de junio de 2018”.
Asimismo, el magistrado ordenó que continúe bajo custodia ya que se quiere evitar obstrucción de la investigación o la destrucción de pruebas.
Por su parte, tanto como Audi, como VW confirmaron la detención y reiteraron que aún existía la presunción de inocencia para Stadler.
Un portavoz de Porsche SE, la empresa que controla VW y Audi, dijo que la detención de Stadler sería abordada en una reunión del consejo de supervisión.
¿Engañó Volkswagen al mundo?
Volkswagen estaba a menos de un mes de la crisis más grande de su historia cuando Oliver Schmidt, un ingeniero de alto rango en el fabricante de autos que trataba con los reguladores en Estados Unidos, escribió un correo electrónico tranquilizador a sus superiores.
Schmidt acababa de reunirse con Alberto Ayala, un subdirector ejecutivo del Consejo de Recursos del Aire de California, el organismo que vigila la calidad del aire en el estado. Durante mucho más de un año, Ayala había estado presionando a Volkswagen para que explicara por qué sus vehículos de pasajeros de diésel contaminaban mucho más en la conducción común que en los laboratorios de pruebas de California.
Este correo pretendía ofrecer una solución al problema de las emisiones. Advirtió, sin embargo, que la información que presentó podría encontrar “vientos en contra” cuando fuera examinada por expertos del laboratorio del Consejo de Recursos del Aire cerca de Los Ángeles.
Los expertos se dieron cuenta pronto que la información que Schmidt presentó era la más reciente de una serie de maniobras por parte del fabricante de autos para ocultar lo que de verdad estaba haciendo.
Semanas después, Volkswagen admitió que los vehículos de diésel que había vendido en Estados Unidos desde fines de 2008 habían contenido software diseñado para camuflar emisiones que excedían enormemente los límites legales.