En la oficina de Catalina Albertí Oliver, Vicepresidente de Planificación y Desarrollo de Industrias Oliver.
Catalina: ¡Buenas noticias Lorenzo!, ¡puedes estar contento! El Consejo ha aprobado la creación de tu cargo como Director de Responsabilidad Social, o como quieras llamarlo.
Lorenzo: ¡Qué bien! Sí, me contenta. Creo que es un gran paso adelante para poder impulsar estos temas tan importantes para el futuro de la empresa. O por lo menos eso creo yo.
Catalina: De acuerdo. Esto te dará legitimidad para encarar las acciones que siempre has querido adelantar.
Lorenzo: Creo que es bueno tener un punto focal de preocupación por el tema, pero creo que es solo el comienzo, ahora viene la acción. Por cierto, ¿aprobaron el Plan de Acción con el presupuesto que pedíamos? Lo importante es el compromiso de todos, no tanto el cargo.
Catalina: La discusión fue muy difícil. Varios de los consejeros pidieron que mostráramos que todos esos gastos iban a rendir beneficios y yo les respondí, como me habías dicho, que algunos producirían beneficios y otros no, que algunos los podríamos medir, pero que a lo mejor otros no, que serían intangibles.
Uno de los consejeros llegó a mencionar que los sueldos no los podíamos pagar con los intangibles, y si bien les dije que el aumento del valor de la empresa en el largo plazo también contaba para los socios, no les convenció. Están más preocupados por los beneficios que reportamos en los estados financieros y el impacto en el corto plazo y sobre la percepción de los acreedores.
Uno de ellos llegó a decir que estas cosas de la RSE solo era de interés para las grandes empresa que cotizan en bolsa y que aún así, eran muy pocos los analistas bursátiles que tomaban esto en cuenta y mucho menos los inversionistas. Otro llegó hasta a decir que si hasta ahora funcionábamos bien para que meternos en cosas que no vienen al caso, total nadie se entera.
Hubieron algunos que salieron en nuestra defensa y ni que decirte la discusión que se armó sobre si íbamos a hacerlo porque sí o solo porque había presiones externas a la empresa.
Después de tanta discusión afortunadamente intervino el Presidente del Consejo, que como sabes representa a la familia Oliver que tienen la mayoría de las acciones, y dijo que teníamos que estar con los tiempos, que en un futuro no muy lejano a lo mejor teníamos que hacer una oferta pública de acciones para financiar el crecimiento y que un historial de responsabilidad no nos caería nada mal. En esto lo respaldó el consejero independiente, el Prof. Iglesias, lo cual nos vino muy bien.
Lorenzo: Bueno, por lo menos hay algunos sensatos en el Consejo. Pero ¿y el Plan de Acción?
Catalina: Bueno, eso no. No quisieron aprobar el plan de acción porque contenía gastos. Lo que sí aprobaron fue de que pudieramos utilizar los ahorros en otras partidas presupuestarias para estos fines.
Lorenzo: ¡Qué c#&@!, ¡estamos j#!@$&s! ¿¿Cuando se darán los ahorros?? ¿¿Y tú crees que los demás gerentes estarán de acuerdo en hacer ahorros?¿ Cuando sepan esto tendrán menos motivación para ahorrar. Antes se lo gastaban a fin de año o lo podían usar el año siguiente. ¿Ahorrar para “dárnoslo a nosotros”, como lo verán ellos? ¡Prefería haber logrado la asignación de recursos que la creación del cargo! Como siempre, te dan el mandato y no el poder para llevarlo a cabo.
Catalina: Tranquilo Lorenzo, he aquí gran parte de nuestro trabajo. Convencerlos de que nuestra campaña es buena para la empresa y buena para ellos.
Lorenzo: Totalmente de acuerdo, es para beneficio de la empresa y por ende para su propio beneficio. ¡Lo verán si no son miopes! Pero no basta con palabras. Si no modificamos los incentivos que actualmente tienen, la forma de cálculo de las bonificaciones, la forma de asignar recursos en el presupuesto, seguirán haciendo lo mismo.
Catalina: Empezaremos con el mandato del Consejo de hacer algo en el tema y de reportarles como nos va y de allí veremos si el año que viene nos podemos meter en el proceso presupuestal para obtener recursos para algunas inversiones y en el tema de incentivos y penalizaciones. El hecho de que me reportas a mí y yo tengo acceso directo al Consejo, nos va a ayudar.
Lorenzo: ¡Eso espero! Yo que he estado tan preocupado sobre las acciones que debíamos tomar con las decenas de proveedores, con el problema ambiental de la planta en Venelivia, con la inestabilidad social alrededor de la distribuidora en Coloxico, con el problema laboral en varios de los proveedores en Vietbodia, entre muchos otros y ahora resulta que esto es secundario en mi trabajo. Resulta que mi primer trabajo no es técnico como yo creía sino político y de gestión de voluntades. Tenía la sospecha, pero no creía que tomara precedencia sobre la acción. Creo que ante estas circunstancias lo mas prioritario es hacer un diagnóstico de lo que lo puede incitar a los gerentes de operaciones, de compras y de de recursos humanos a trabajar con nosotros.
Catalina: Por eso te seleccionamos a ti, porque puedes manejara ambas facetas de la tarea. Te ayudaré en lo que pueda, pero te corresponde a ti liderar los esfuerzos, preparernos una estrategia de cómo convencerlos, de qué es lo que tenemos en común, cómo venderles la idea, de mostrarles los beneficios………..cuando los haya. Coincido contigo con el tema de incentivos y en lo de asignación de recursos y creo que también debemos trabajar arduamente en ello, pero será más adelante, cuando tengamos algo que mostrar.
Lorenzo: Gracias tu apoyo. Creo que mientras hacemos esto, también deberé buscar algunas acciones sin costo o de bajo costo, con beneficios tangibles y en el corto plazo y así usarlos como ejemplo en casos menos obvios. Debo recoger primero la fruta que está al alcance de la mano.
Catalina: Así es. Vamos, verás que con paciencia y perseverancia logramos hacer muchas cosas. Esas son las mejores armas. En estos asuntos la fuerza solo rinde beneficios efímeros.
Lorenzo: Tienes razón. Aquello de enviar un memo tuyo o del Presidente y forzarlos a tomar algunas medidas suele tener resultados que se esfuman en cuanto te descuidas o en cuanto pueden decir que hicieron algo, aunque solo sea en el papel. Antes de hablar con algunos gerentes, y dado que no puedo ofrecerles dinero, tengo que revisar la estrategia que tenía.
Catalina: ¡Adelante! Cuenta conmigo.
Lorenzo: Gracias por tu apoyo Catalina. Por lo menos eso tengo. Manos a la obra. Ya te contaré como me va.
Antonio Vives
Con un Ph.D. en Mercados Financieros de Carnegie Mellon University y con una trayectoria como profesor en 4 escuelas de negocios, Antonio Vives es actualmente catedrático y consultor en la Stanford University. Socio Principal de Cumpetere. Ex-Gerente de Desarrollo Sostenible del Banco Interamericano de Desarrollo. Creador de las Conferencias Interamericanas sobre RSE. Autor de numerosos articulos y libros sobre RSE y del blog Cumpetere en español.