En Hollywood cualquier ocasión es buena para presumir de gestos ecológicos. Conducir un coche híbrido o plantar en un rincón de jardín paneles de energía solar son dos buenos ejemplos. Sin embargo, con la ropa es diferente. A la hora de posar en la alfombra roja, a las estrellas lo único que les importa es quedar bien en las fotografías. Prefieren no enredarse en mensajes ecológicos, ni mucho menos salirse de la norma.
Pero Livia Giuggioli, productora de documentales y casada con Colin Firth desde hace 14 años, se ha empeñado en cambiar esta actitud. Del brazo de su marido pretende demostrar que el glamour no está reñido con lo verde.
En 2010 esta italiana afincada en Londres inició una pequeña revolución. Debía acompañar a Firth — ganador el año pasado del Oscar al mejor actor por su papel del soberano británico, Jorge VI, en El discurso del rey— a diferentes premios cinematográficos, pero no quería seguir el patrón convencional de recurrir a un estilista o tocar la puerta de las casas de alta costura para pedir ropa prestada.Y en este cambio de guion, decidió vestir sólo con moda sostenible.
Así, durante los últimos dos años ha usado prendas antiguas, recicladas, elaboradas de tejidos orgánicos y joyería ad hoc, demostrando que frente a los flashes pueden aguantar el tipo junto a exclusivos diseños que parecen recién salidos de las pasarelas. Livia, además, hasta ha repetido modelo, algo que insólito en la industria cinematográfica.
Esta temporada, se propuso un reto aún más ambicioso: pedir a conocidos diseñadores de moda que confeccionasen modelos especiales para los Globos de Oro, los BAFTA, los Oscar y otros eventos. “La moda es una gran comunicadora”, declaró Giuggioli. “En este caso, queremos promover la justicia social, la integridad medioambiental y el mejor diseño”, añadió.
Tom Ford, Giorgio Armani, Karl Lagerfeld, Stella McCartney, Paul Smith, Valentino, Roger Vivier o Alberta Ferretti son algunos de los diseñadores que han colaborado este año con el experimento. Giorgio Armani dio el pistoletazo de salida con un vestido elaborado con botellas recicladas que Livia llevó en los Globos de Oro.
Tampoco le ha ido mal a Giuggioli alistando a ciertos actores. Para la ceremonia de los BAFTA vistió a Michael Fassbender con un esmoquin de lana orgánica de Armani y a Viola Davis con el primer vestido sostenible de la casa Valentino. Para esta edición de los Oscar, Livia (que llevó un Valentino rojo de seda y tejido reciclado) reclutó a los nominados Kenneth Branagh y Demián Bichir, ambos con trajes de Ermenegildo Zegna. La ganadora del Oscar a la mejor actriz, Meryl Streep, fue otra de las adeptas a la alfombra verde, luciendo el primer diseño ecológico de Lanvin, un vestido dorado confeccionado especialmente para la ocasión.
Colin Firth no ha sido inmune al poder de persuasión de su mujer. Como Livia anunció en su blog dentro de la página web de la edición británica de Vogue, bautizada como Green Carpet Challenge (el reto de la alfombra verde), en los Oscar el actor reutilizó el mismo esmoquin de Tom Ford que se puso para recoger la estatuilla que recibió por El discurso del Rey.
Giuggioli, que dirige junto a su hermano la tienda y consultoría Eco Age, tiene previsto lanzar su propia línea de ropa, como no, cien por cien ecológica.
Fuente: ElPais.com
Por: Brenda Otero.
Publicada: 28 de febrero de 2012.