Eliminar los plásticos del mar es un objetivo de empresas y gobiernos. El plástico es un producto que daña nuestros ecosistemas y que incluso llega a ser mortal para varias especies.
Por ello, se han tomado diversas iniciativas para eliminar el plástico del océano y revertir el daño que este material ha causado.
Una de las firmas que se ha preocupado por ello es The Ocean Group Cleanup que desde hace unos meses está estrenando una tecnología para eliminar el vertedero de plástico más grande del pacífico.
The Ocean Group Cleanup desde hace cinco años desarrolla una operación que tiene como objetivo reducir considerablemente la enorme cantidad de plásticos acumulada en este lugar.
La obra consiste en un tubo flotante capaz de crear una especia de U, el cual atrapa el plástico y lo recoge. Éste fue instalado en el vertedero hace un año, sin embargo, al darse cuenta de que el sistema no retenía los residuos, la organización llevó a cabo una revisión y notó que la estructura presentaba fracturas.
Por ello que The Ocean Group Cleanup cambió su plan de desarrollo el cual aspira a poder reducir en un 50% la superficie del vertedero en un lustro y además el tubo se retiró para una fase de reparación y revisión.
De esta manera comenzó la recolección de plástico y el monitoreo de las respuestas del sistema.
Al cabo de un periodo de tiempo, se ha dado cuenta que sí ha podido retirar gran cantidad de basura en el océano, sin embargo, existe una controversia latente: el enorme dispositivo no solo recoge residuos sino también minúsculos animales, particularmente del género Velella y Janthina, que viven a la superficie del mar y son esenciales para el ecosistema.
Rebecca Helm, una bióloga especializada en gelatinas flotantes y profesora en la Universidad de Carolina del Norte en Asheville, está muy preocupada por este sistema masivo de limpieza y en declaraciones para El País, dice que «si en tan solo dos días se han llevado a 100 animalitos, lo que puede ocurrir en cinco años es muy alarmante”.
Tras la recolección de basura, la bióloga hizo un análisis de una fotografía publicada por la organización. En ella, percibió entre los plásticos, cientos de especies diminutas parecidas a los caracoles morados y a las medusas azules.
Helm las ha rodeado todas de un círculo rojo y ha compartido su trabajo en un hilo de Twitter con el comentario siguiente: “Al principio del año advertí que The Ocean Cleanup capturaría y mataría la vida marina flotante”.
Estas especies están expandidas sobre 50 millones de kilómetros cuadrados, por lo tanto, según Boyan Slat, es imposible que su dispositivo destroce la fauna en cuestión.
Por su parte, The Ocean Cleanup reconoce el problema, sin embargo, afirma que la cantidad de animales descubiertos corresponden a los cálculos previos a la misión.
«Aunque no estamos contentos de que se haya producido esto, no nos sorprenden las observaciones de estos organismos en la acumulación de plástico y todavía esperamos que el impacto siga siendo mínimo”.
Isla basura
El plástico acumulado en el mar se está yendo hacia un lugar llamado Isla Basura. Este material afecta la flora y la fauna de los ecosistemas.
Entre los plásticos encontrados se encuentran, juguetes para niños, aparatos electrónicos, redes de pesca, fragmentos de desechos. En total 87 mil toneladas de basura que hay en el océano.
De acuerdo con los autores de un estudio que habla sobre la acumulación de basura en esta zona, científicos inspeccionaron las islas Cocos (o Keeling), territorio australiano casi deshabitado del océano Índico, y calcularon que las playas estaban cubiertas con alrededor de 414 millones de fragmentos de plástico, los cuales podrían tener un peso de hasta 262 toneladas. La investigación fue publicada el 16 de mayo en la revista Scientific Reports.
La cantidad de microplásticos es indefinible. Tan solo en 2017, el equipo documentó la cantidad de microplásticos (fragmentos que miden entre 2 y 5 milímetros), desechos de plástico más grandes, y escombros de madera y metal que contaminaban 25 playas, además halló cerca de 977,000 zapatos, así como 373 mil cepillos de dientes y otros artículos desechables, incluyendo popotes y bolsas de plástico, las cuales representaron cerca de la cuarta parte del total de escombros. De igual manera, los investigadores descubrieron que 93 por ciento de la basura se encontraba enterrada hasta 10 centímetros bajo la arena.