Donald Trump ha comenzado una embestida legal en contra de una aprobación que otorgó el gobierno escocés a una granja eólica de alta mar que, según él, echará a perder la vista desde su campo de golf.
El Centro Europeo de Desarrollo Eólico de Alta Mar de once turbinas se encuentra entre 2 y 4.5 km de la costa de Aberdeen en la que Trump International Gold Links abrió el verano de 2012, a pesar de la oposición de algunos residentes y ambientalistas.
Se espera que la granja eólica de 100MW sea capaz de satisfacer las necesidades de 49,000 hogares, casi la mitad de Aberdeen y busca permitir que desarrolladores prueben nueva tecnología de alta mar antes de su lanzamiento comercial.
Las obras empezaron hace un par de semanas, pero el proyecto puede ser retrasado como resultado de la petición en la corte de Edinburgo que solicita que se declare ilegal al centro de energía.
Trump declaró que seguirá con el proceso legal “el tiempo que requiera, sin importar el costo”.
“Vattenfall, AREG y Technip se equivocaron al proponer un proyecto que destruiría totalmente la bahía de Aberdeen. La retirada de Vattenfall indica claramente la falta de confianza en la viabilidad económica de las instalaciones”, agregó el señor Trump en referencia a la decisión de la compañía sueca de energía de reducir su participación en el proyecto.
“No permitiremos al gobierno escocés ni a nadie afectar lo que hemos creado en Trump International Golf Links y esperamos terminar esta batalla para dejarla atrás”.
Un vocero del gobierno escocés declaró al periódico The Herald que la decisión de aprobar la granja eólica fue tomada “tomando en consideración de todos los temas materiales relacionados con la solicitud”, así como los puntos de vista de todos los interesados y miembros de la comunidad.
“Este desarrollo ofrece una oportunidad significativa y estratégica para que Escocia aproveche sus enormes recursos renovables”, agregó.
El director de WWF Escocia, Lang Banks, dijo que un sector eólico de alta mar exitoso puede agregar más de 7 mil millones de libras a la economía del país y brindar 28 mil trabajos directos para 2020.
“Es un poco triste pensar que Trump no tiene nada mejor que hacer que usar sus millones para tratar de detener la ambición escocesa de convertirse en una nación más limpia, más verde y con más empleos”, agregó Banks en su declaración. Puede que él esté feliz desperdiciando su propio dinero. Pero, defender su acción legal también le costará a los contribuyentes escoceses.
“Finalmente, al igual que el parlamento de Escocia, esperamos que la corte vea a través de su blofeo y fanfarroneo y esté de acuerdo en que aprobar el proyecto eólico fue la decisión correcta. Sería una gran desgracias si Donald Trump fuera el responsable de evitar que Escocia reduzca sus emisiones y crezca su economía”.
Fuente: Reconecta