Casas de cambio, afianzadores y uniones de crédito son sólo algunas de las instituciones en México que no cuentan con programas de educación financiera, la cual, pese a la importancia que tiene, sólo es promovida en cerca del 10 por ciento de estos organismos.
En México es escaso el conocimiento de productos financieros de ahorro, inversión, seguros y crédito, y a esta problemática se suman los millones de habitantes sin acceso al sector y la baja penetración de esta actividad en la economía.
Pese a la importancia que tiene la cultura financiera, en el país sólo 10 por ciento de las instituciones promueven programas de educación sobre los servicios y productos que ofrecen.
Es común ver personas que contratan créditos con altas tasas de interés, que ahorran en instituciones no reguladas, que se encuentran sobreendeudadas, en cartera vencida, o bien que tienen su ahorro en Afores con una comisión alta y rendimientos por debajo del promedio, lo que a la larga afectará el monto de su pensión.
Por ejemplo, en el sector de las Afores, del total de traspasos de cuentas que se realizan entre administradoras, más de 50 por ciento se va a empresas que les otorgan un menor rendimiento.
De acuerdo con información del Buró de Entidades Financieras (BEF), de mil 633 instituciones financieras que reportan información completa a este sistema, 10 por ciento tiene programas de educación financiera.
Las Afores son las instituciones que en su mayoría cuentan con este tipo de programas, con nueve casos, de un total de 11 administradoras. Sólo Coppel y Principal carecen de estos esquemas de educación.
Carlos Noriega Curtis, presidente de la Asociación Mexicana de Afores (Amafore), explicó que por la naturaleza de estas empresas es que deben promover una mayor educación financiera.
Participan pocos bancos
De los 45 bancos que operan en el país sólo cinco promueven programas de educación, según la información reportada por el BEF.
Este sistema reportó que de las 103 compañías de seguros que subieron sus datos al Buró, cinco son las que registraron ante el BEF tener programas educativos sobre el uso de los productos que ofertan.
Sobre esta situación, Recaredo Arias Jiménez, director general de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), reconoció que existen diversas aseguradoras que carecen de esquemas de información financiera, pero que estos se promueven a través de este organismo gremial.
“Hay que considerar que en muchos casos compañías pequeñas y medianas descansan en la parte de educación financiera de la Asociación y además existen empresas grandes que sí tienen este tipo de esquemas muy robustos. Aquí consideramos que debe prevalecer el esquema de proporcionalidad, donde se debe entender que no todas las aseguradoras pueden hacer el mismo esfuerzo”, dijo.
Entre las instituciones que carecen de programas de educación están las casas de cambio, afianzadoras y uniones de crédito.
El gobierno espera integrar para el próximo año una estrategia nacional de educación financiera que buscará el uso responsable de estos productos y servicios.
Fuente: El Financiero