Estamos de acuerdo en que potenciar la participación total de la mujer en el mundo de la economía en todos sus sectores y a cualquier nivel de actividad económica es algo esencial para construir una economía más sólida, una sociedad más estable y lograr objetivos para el desarrollo y los derechos humanos.
La experiencia demuestra que desarrollar propuestas y normativas que resulten en potenciar el papel de la mujer requieren una comprensión específica de la dimensión del género, el contexto y el impacto buscado. Sin embargo, hasta hace muy poco, no se ha definido una guía de principios básicos para que las empresas potencien el papel de la mujer en el mercado laboral global.
En 2004, la empresa de inversiones Calvert, en colaboración con la Fundación de Desarrollo para las Mujeres de las Naciones Unidas, UNIFEM, desarrolló el primer código de conducta voluntario para guiar a las empresas en cómo potenciar e invertir en la mujer y su avance a escala mundial.
1 Los Principios de la Mujer de Calvert (Calvert Women’s Principles®) recopilan una variedad de formas en las que las empresas pueden contribuir en el avance de la mujer. A pesar de que estos principios han suscitado una respuesta firme y positiva, muchos han sugerido crear una selección global de accionistas para debatir cómo estimular e implementar estos objetivos a escala mundial.
En este contexto The Global Compact comparte el documento «El avance de la mujer, el avance del negocio y el apoyo a objetivos de desarrollo internacionales: principios básicos para el Sector Corporativo», el cual puede descargar aquí.
