El navío, alimentado por más de 800 paneles solares, busca enviar un mensaje al planeta sobre el combate al cambio climático
Es uno de los puertos más simbólicos del mundo, el dramático escenario de todo: desde antiguos barcos de vela romanos hasta los navíos militares de la Segunda Guerra Mundial y los botes rápidos que devoran combustible.
Ahora, el histórico río Támesis de Londres es el anfitrión de una nueva generación de botes que podría revolucionar no solo el futuro del diseño náutico, sino las investigaciones científicas en alta mar.
Les presentamos el MS Turanor de Planet Solar, el bote propulsado por energía solar más grande del mundo.
Un carácter cálido
Es más parecido a la nave espacial Enterprise que a un catamarán moderno. El navío de 35 metros llegó a la capital británica la semana pasada: es la última escala de una expedición científica a través del Atlántico.
El crucero de 60 toneladas cuenta con una cubierta expandible de más de 500 metros cuadrados equipados con paneles solares y está completamente alimentado por el sol.
Los más de 800 paneles solares recargan las enormes baterías de ion de litio almacenadas en los cascos gemelos del catamarán que alimentan los dos motores eléctricos traseros.
«Con la batería totalmente cargada podemos navegar durante 72 horas sin sol», dice el capitán, Gerard d’Aboville, quien también fue el primer hombre que remó en solitario a través de los océanos Atlántico y Pacífico.
«Recibo los pronósticos meteorológicos para la semana siguiente y se actualizan en nuestro mapa cada hora, así puedo elegir la ruta más soleada».
Una expedición ecológica
El navío de 16 millones de dólares (205 millones de pesos) lucía impresionante mientras navegaba bajo el Puente de la Torre en Londres y marcaba el final de una expedición científica de más de tres meses a lo largo de la corriente del Golfo, en el Atlántico.
El equipo de científicos zarpó en junio de Miami y examinó muestras de agua y aire como parte de sus investigaciones sobre el cambio climático.
Bajo el mando del climatólogo de la Universidad de Ginebra, Martin Beniston —integrante del panel sobre cambio climático que contaba con el respaldo de las Naciones Unidas y ganó el premio Nobel de la paz en 2007—, usaron «aspiradoras» de alta tecnología para medir los aerosoles (partículas finas en el aire) y cabrestantes sumergidos a 200 metros.
«Debido a que el bote no genera contaminantes, lo que medimos es lo más natural posible», dijo Beniston.
«Además, en lo que respecta a crear consciencia, hemos efectuado las investigaciones en un bote que podría relacionarse con el futuro y reducir nuestra huella de carbono».
Un diseño que rompe récords
No es la primera vez que los navíos de alta tecnología hacen noticia en todo el mundo. En mayo de 2012 se convirtió en el primer navío alimentado de energía solar que dio la vuelta al mundo y viajó a una velocidad promedio de cinco nudos (9 kilómetros por hora).
Rompió más récords a principios de este año al cruzar más rápido el Atlántico impulsado por energía renovable: viajó de España a las Indias Occidentales en 22 días y batió su marca anterior por cuatro días.
El bote de alta tecnología es creación del aventurero ecologista suizo, Raphael Domjan, lo diseñó la empresa de arquitectura náutica de Nueva Zelandia, LOMOcean Design, y fue construido en los astilleros alemanes de Knierim Yachtbau en 2010.
Tiene capacidad para 60 personas y es más probable que veas al inusual bote antes de que lo escuches. A diferencia de los barcos comunes, el MS Turanor de Planet Solar se desliza suavemente por las aguas.
«El bote tiene una apariencia muy especial con su plataforma expandible», dijo d’Aboville. «De hecho, estábamos a dos millas de las costas de Mónaco cuando algunas personas llamaron a la policía para informar que había un avión en el agua».
Un nombre viejo, una nueva imagen
Sin embargo, para ser un navío de apariencia tan futurista, el MS Turanor de Planet Solar tiene un nombre que suena antiguo.
El Turanor recibió su nombre de la palabra que significa «poder del sol» en la trilogía de El señor de los anillos, de J.R.R. Tolkien.
Tal vez demuestre también que es el principio de una aventura épica, pero esta vez desarrollada en altamar.
Fuente: CNN Mexico.