Las primeras noticias que llegan desde Pittsburgh la importancia que que los miembros del G20 dán en la «nueva economía» a la Transparencia, el cambio climático y el diálogo con los países más pobres
Entre las resoluciones que se han ido conociendo a lo largo de la mañana de este viernes hay algunas que ya se aventuraban como que los bonus bancarios estén ligados a los beneficios a largo plazo de las entidades porque favorecen la asunción de riesgos excesivos, así como que se establecerán nuevos estándares internacionales sobre la solvencia de los bancos.
Mucho más novedoso y desde luego más responsable es tener en cuenta a los países de Sur para ello las grandes potencias y los países en vía de desarrollo colaborarán y trabajarán juntos cuando llegue el momento de retirar las iniciativas económicas extraordinarias.
Tambien acuerdan ceder un 5% de su voto en el Fondo Monetario Internacional (FMI) a los países que cuentan con poca representación en el organismo. En definitiva, reformar el FMI y dar más protagonismo a los países que tienen menos peso.
En el ámbito de la RSE se darán pasos para contener los excesos empresariales como los que derivaron en la crisis financiera global. Lo cual significará un mayor grado de transparencia en las entidades finacieras y abre la puerta a una mayor regulación de estas entidades
La sostenibilidad es otro de los aspectos que preocupan a los participantes del G-20 y su objetivo es retirar paulatinamente los subsidios al petróleo y otros combustibles fósiles con la intención, «a medio plazo», de reforzar las energías limpias. Paralelamente, los países redoblarán sus esfuerzos para alcanzar un acuerdo en materia de cambio climático en la ONU incluso a finales de este año.
