Por: Emilio Guerra Díaz
Del mundo de las organizaciones civiles, algunas destacan en el plano internacional. Varias iniciativas de mujeres y hombres que inspirados en el servicio o la promoción de una causa social han fundado alguna organización cuyos efectos e impactos podemos percibir en nuestros días. Piense por ejemplo el caso del inglés Robert Stephenson Smith Baden Powell, quien a principios del siglo pasado fundara el movimiento Scout Mundial.
Habría que distinguir también al Club Rotario o Rotary Internacional como es conocido mundialmente. Paul Harris es el fundador de este movimiento. Corría el año de 1905 cuando se propuso reunir a un grupo de amigos interesados en el servicio para crear en Chicago el primer Club. Harris, junto con Silvester Schiele, Gustavus H. Loehr e Hiram E. Shorey pusó en marcha una avalancha de contribución cívica al bienestar de la comunidad que no se ha detenido.
Aquellos días Harris y sus amigos idearon invitar a otros personas a unirse al club estableciendo ciertos requisitos, uno de ellos, es que solo se podría ingresar al Club por invitación de algún socio. Así creció el movimiento en Chicago. Luego de definir que el propósito sería realizar acciones para el bien común basadas en la amistad para servir, sin distinguir o excluir a nadie, establecieron “Las avenidas de servicio”: Apoyar al Club, brindar servicio a la comunidad, disponer de la profesión personal de cada socio e impulsar el servicio internacional. Estos cuatro pilares siguen dando guía a su trabajo.
A México, el Club Rotario llegó en el año 1921; la primera congregación se dio en la ciudad de México y luego vendrían clubes en Tamaulipas en 1922, Monterrey y otras de las principales ciudades.
En la historia del “rotarismo” en el país, dos mexicanos han trascendido a la fama mundial. El primero de ellos, el Dr. Carlos Canseco González, tamaulipeco de origen pero casi siempre identificado erróneamente como neolonés, propuso al Club Rotario Internacional el proyecto “Polio Plus” a través del cual el movimiento, junto con empresas y gobiernos, se dio a la tarea de erradicar la poliomielitis en el mundo.
Otro gran rotario es Frank Devlyn, nacido en Chihuahua, que siguiendo el ejemplo de su padre se dedicó a apoyar a la población que tenía problemas de visión y su programa de ayuda se expandió prácticamente a todo el país. A la larga Frank y sus familiares crearon la empresa Ópticas Devlyn. Frank fue presidente internacional para el periodo 2000-2001.
Lo importante para este espacio es destacar algunos hechos positivos del trabajo de los rotarios en México.
- En primer lugar es necesario reconocer y desde luego agradecer que todos los rotarios participen en forma voluntaria y a la larga terminan aportando su dinero
- Son grandes movilizadores de recursos y colaboran con diversas y muy variadas causas y organizaciones sociales
- Han desarrollado el sentido colaboracionista y revelado a todos sus miembros la valía del trabajo en equipo
- No hay semana donde los rotarios dejen de estar brindando servicio a la comunidad
- Sus miembros inviten a otras personas a desarrollar su sentido de generosidad para canalizarlas en acciones bien estructuradas
- Al incentivar que se aproveche la profesión de cada miembro potencian recursos a favor de la filantropía
- Han infiltrado el espíritu de servicio en un buen número de empresarios, y aún cuando no se les ha reconocido formalmente, de manera muy sólida gracias a sus principios y valores, han impulsado prácticas de responsabilidad social corporativa
- También son responsables directos de la creación de nuevas fundaciones y organizaciones filantrópicas
Rotary Internacional se nutre también del talento femenino y cientos de clubes son mixtos. La labor de Rotary International es constante y contundente. Para apoyar sus acciones crearon la Fundación Rotaria que aún cuando formalmente no es una fundación empresarial si reúne a miles de empresarios en el servicio comunitario. De tal suerte que los rotarios colaborando en su Club pueden presentar iniciativas y apoyarse también en expedir recibos deducibles a favor de sus donantes.
Por lo anterior, si está interesado en colaborar con su comunidad una buena recomendación es que se afilie a un Club Rotario.
Desde el Consejo Directivo
El Presidente del Consejo Directivo señaló que la Fundación Banorte, a través de la estación radiofónica Las 40 Principales otorgó 1 millón 750 mil pesos que fueron distribuidos entre el Patronato Pro Zona Mazahua A.C., para proyectos de mujeres indígenas en Chiapas y Campeche. Banorte invertirá un millón de pesos ahí. Las otras organizaciones son Amigos de Sian Ka’an A.C., que realiza un extraordinario trabajo en Quintana Roo, Hope Worldwide y Tequio y Conocimiento. Cada una de ellas recibirá 250 mil pesos. Omar Chaparro colaboró en el evento de otorgamiento de estos donativos refrendando su disposición a colaborar con diversas causas filantrópicas.
El tesorero del Directorio compartió con sus colegas que la Fundación Telmex en colaboración con el DIF Tamaulipas donó más de 3 mil bicicletas que se repartirán en estudiantes para facilitar su llegada a la escuela. Parece ser una acción insignificante, pero en realidad tiene gran relevancia porque se apoya a infantes en comunidades rurales, lo que disminuye sustancialmente su tiempo de traslado.
El Director de la organización recordó que este 1º de octubre se llevará a cabo el III Foro CEMEX-Tec, que presenta interesante programa de expositores y cuya agenda se puede consultar aquí, Asimismo se entregará el premio homónimo. El evento no tiene costo.
Emilio Guerra Díaz
Emilio Guerra cuenta con amplia experiencia en la Gestión de la RSC, destacando su trabajo en el área de vinculación con la comunidad que potenciar la inversión social empresarial. Ha gerenciado fundaciones empresariales.