Los libros pueden hacer muchas cosas por el desarrollo de un niño, desde estimular su imaginación hasta enseñarle los primeros conceptos de ecología y sustentabilidad. La editorial argentina Pequeño Editor llevó más lejos este último punto, al crear el primer libro que puede plantarse después de leerse.
Mi papá estuvo en la selva es un volumen infantil que la editorial ya había publicado en el formato tradicional, pero decidió hacer un tiraje especial, que no estuvo a la venta, para ayudar a crear conciencia entre los más pequeños. Los autores Gusti y Anne Decis donaron los derechos para hacer posible este proyecto.
Para mostrar al público cómo el ejemplar puede convertirse en una planta, se colocaron cajas transparentes llenas de tierra en los escaparates de librerías en Buenos Aires. Así, los paseantes podían ver crecer ante sus ojos una jacaranda, árbol nativo de Argentina.
Lograr un libro «plantable» requirió de un proceso artesanal en el que se usó papel libre de ácido, al que se le agregaron semillas certificadas por el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria. Los textos y dibujos se imprimieron con serigrafía y tintas biodegradables, mientras que las hojas fueron costuradas de forma manual.
El proyecto se promocionó en diversos medios locales en marzo de 2015, pero ya le ha dado la vuelta al mundo gracias a lo innovador del concepto. En declaraciones a AdLatina, la directora editorial y el director artístico de Pequeño Editor hablaron sobre cómo alinearon el «libro árbol» con su marca: «El Libro árbol reúne en sí mismo todo lo que nos gusta hacer: es un objeto súper atractivo y con un sentido profundo y potente. Y nos ha permitido transmitir un mensaje claro y eficaz sobre la conciencia medioambiental y la promoción de la lectura.»
Para lograr que el libro se convierta en unb árbol solo hay que seguir unas sencillas instrucciones: leer y disfrutar la historia, que tiene un mensaje de conservación, las veces que la familia quiera. Después, humedecerlo y plantarlo en un lugar húmedo cerca de la sombra. Una vez que germine, se puede plantar al ras del suelo y regarlo con regularidad.
Se puede leer un pequeño teaser del cuento en línea aquí.
Imágenes de Pequeño Editor
Me parece maravilloso…