El origen del racismo en México y en todos los países, se define como prácticas y acciones que reflejan que la humanidad se encuentra divida en distintos grupos biológicos que comparten ser superiores o inferiores.
A pesar de que hay una lucha permanente por querer eliminar los signos racistas y evitar que éste se propague, todavía existen personas y hasta marcas que siguen cometiendo el mismo error.
Es por eso que es muy importante que en una empresa se capacite a la perfección sobre este tema con el fin de erradicarlo. Es fundamental que los directivos de las organizaciones pongan primero el ejemplo para que así, sus colaboradores puedan seguir una misma línea.
Si no hay una capacitación de por medio, se pueden cometer errores como los siguientes:
Las marcas y sus metidas de patas
Hoy en día, los consumidores han demostrado mayor interés hacia aquellas marcas que se comprometieron con la comunidad y el medio ambiente.
Sin embargo, aunque muchas de estas marcas habían tenido una racha de campañas inclusivas, llenas de empoderamiento y diversidad, han metido la pata con campañas que demuestran que el racismo sigue presente en la publicidad.
Como en el caso de la marca H&M, que a pesar de tener un programa impecable sobre el reciclaje y la reutilización de prendas, hace un par de meses resaltó por haber compartido una de las sudaderas más racistas y por no saber reaccionar ante la crisis que se desató.
Otra marca que también se volvió un gran ejemplo de campañas racistas fue la marca Dove, que aunque llevaba un largo rato celebrando la belleza real de las mujeres, todos sus esfuerzos se vieron dañados por una campaña en la que una mujer de tez negra se cambiaba por una de tez blanca.
A pesar de que la modelo, que encabezó esta campaña, compartió que el comercial no es racista y que también es responsabilidad de los consumidores investigar más antes de declarar que algo esta mal o no, el comercial ha ganado el reconocimiento a uno de los más racistas en la historia de la publicidad.
Pero…¿Cómo es que surgió el racismo en México?
El origen del racismo en México
Desde la llegada de los españoles, cuando trataron a los más morenos como sus esclavos, comenzó el origen del racismo. En esos tiempos, si una persona era de tez blanca se le podía catalogar como de «categoría o clase» pero si era de tez morena se le discriminaba e incluso debía servir a los demás.
Sin embargo, se supone que los tiempos han cambiado pero todavía falta mucho por hacer; puesto que en México todavía se pueden escuchar las frases como “Nunca falta el prietito en el arroz”, “se fue como las chachas”, o “traes el nopal en la cara” y en otro tipo de acciones que afirman que en México sí existe el racismo.
¿Alguna vez dijiste alguna de esas frases? Seguramente sí.
Para poder eliminar el racismo es necesario que no solo la sociedad civil se involucre con ello, también es responsabilidad de las empresas tener un lenguaje incluyente en su forma de comunicar campañas y así, los ciudadanos se «contagien de inclusión» y pueda haber uuna sociedad menos discriminatoria.
Para Evelia Reyes, maestra en historia y doctorante en el Colegio de México, en México existe un retraso de casi 100 años en tolerancia entre nosotros mismos.
Lo que demuestra que el origen del racismo en México se da en acciones tan simples: “Si nos enfocamos solo en actitudes, Estados Unidos manifiesta su racismo de una manera más violenta; sin embargo, el racismo en México tiene otras formas de eliminación hacia el grupo que consideramos inferior”.
Un ejemplo es que, desde 1920, se ha intentado eliminar las costumbres y tradiciones de los indígenas y que cuando José Vasconcelos era secretario de Instrucción Pública, solo permitía que las clases se dieran en español, obligando a las comunidades más vulnerables a olvidar su lengua natal.
De acuerdo con Evelia Reyes, este tipo de sistema racista no ha cambiado y que incluso gracias al racismo, muchas lenguas indígenas están comenzando a perderse.
Mientras que Adán García, director académico del Museo de Memoria y Tolerancia señala que típicamente el color de piel implica el acceso a mayores y mejores oportunidades de desarrollo.
Adán comparte que esta situación es una herencia que se puede interpretar como «mala suerte», ya que se va a repetir por generaciones, lo que implica que las personas afrodescendientes van a sufrir racismo por muchos más años, y sus hijos, y los hijos de sus hijos y así toda su familia.
Aunque existen muchas iniciativas para evitar el racismo y la discriminación, los mexicanos siguen sin estar del todo consientes sobre que este concepto sí existe en México y que muchas personas se ven afectadas.
Hace unos meses se realizó una encuesta por parte de El Financiero, en el cual se dio a conocer que todavía se piensa que las personas que tienen un color de piel más claro que la otra, tiene mejores oportunidades de empleo y un mejor salario.
El 39% de los mexicanos cree que una persona de piel clara tiene más éxito de encontrar un “buen trabajo” en nuestro país, comparado con alguien que tiene la piel morena oscura.
Únicamente el 9% de las personas dice que la piel morena tendría mejores perspectivas laborales, mientras que el 49% opinó que ambas personas con tonos de piel diferentes tendrían las mismas oportunidades.
¿Será posible que la importancia del color de piel pierda relevancia en nuestro país y el el mundo? Déjanos tus comentarios.