El síndrome de Down es un tipo de discapacidad intelectual que afecta a uno de cada 700 recién nacidos. En México se estima que hay alrededor de 150 mil personas con esta condición, sin embargo solo el tres por ciento tiene acceso a la educación especializada que requiere.
Esta condición se trata de una alteración genética, también conocida como trisomía 21, ya que al momento de la concepción, se presenta un cromosoma extra en el par 21. Las personas que lo padecen tienen un grado variable de discapacidad cognitiva y más posibilidades de desarrollar enfermedades del corazón, sistema digestivo y sistema endócrino.
Una correcta estimulación temprana, que abarque los primeros tres años de vida del niño, puede hacer la diferencia en su desarrollo. En los años posteriores, fomentar actividades que promuevan el ejercicio físico, ayuda a fortalecer sus habilidades psíquicas y motrices.
El verdadero problema de un niño con Síndrome de Down
Contrario a lo que se pudiera imaginar, uno de los más grandes problemas a los que se tiene que enfrentar día a día una persona con síndrome de Down, no tiene nada que ver con su capacidad o habilidad para realizar determinada acción; lamentablemente, lo más difícil para ellos y sus familias es el rezago social que viven, a pesar de ser la causa más común de discapacidad intelectual en el mundo.
La única diferencia de interactuar con personas con síndrome de Down está en nuestra mente; en nuestras propias barreras y falta de inclusión… no en ellos
Es importante que haya un cambio en la mentalidad de la sociedad, eliminar la discriminación, romper con la falta de información, volvernos inclusivos y brindar más y mejores oportunidades de desarrollo a personas con discapacidad, en este caso con síndrome de Down, así como crear políticas públicas incluyentes que hagan más fuerte su voz y que les permita tener una mejor calidad y lograr la mayor independencia posible.
¿Quién hace equipo con ellos en México?
En México, uno de los centros educativos para personas con síndrome de Down desde hace 34 años es Fundación CEDAC en Ciudad de México, que se dedica a la formación y educación de niños, jóvenes y adultos con esta discapacidad, a través de diversos talleres y cursos que cuentan con atención especializada.
A inicios del mes de abril de este 2017, pudimos asistir a la inauguración de la cancha de fútbol en CEDAC, donada al centro por Fundación Gigante, con diversas adaptaciones como porterías protegidas y una red que evita que el balón se salga del perímetro.
La nueva cancha se estrenó con un emocionante partido de fútbol entre dos equipos conformado por estudiantes del centro, fue ahí donde pudimos notar que la única diferencia entre ver o jugar un partido con personas con discapacidad, es la que está en la mente de las personas, pues fue un juego como cualquier otro, con porras, goles, celebraciones, competencia y por supuesto mucha diversión.
Los jóvenes se mostraron muy entusiasmados con el nuevo espacio. Miguel Ángel Piñones, miembro del patronato de CEDAC destacó que además de fomentar el deporte, esta cancha promueve la integración familiar, debido a la dinámica de los entrenamientos, la organización de partidos y la definición del diseño de los uniformes, “hace que las mamás y los papás participen más y eso logra que la integración entre los niños y su familia sea cada día mejor”.
Además de la academia de fútbol, en este centro se pueden encontrar clases de natación, taller de panadería, repostería, repujado, karate, educación musical, estimulación temprana, artes plásticas, entre otras, que benefician actualmente a un total de 104 personas, desde bebés hasta adultos de 25 años de edad, con educación específica para cada etapa.
Un Gigante los apoya
Grupo Gigante a través de su fundación busca estar presente en diversas causas sociales, así como mostrar su compromiso con las comunidades donde tiene presencia, y lo hace por medio de acciones, iniciativas y donaciones a causas enfocadas principalmente en salud, educación y desastres naturales.
En relación a CEDAC y al patrocinio de la cancha, Jaime Alverde Losada, Director de operaciones de Grupo Gigante afirmó “Son unos niños increíbles y estoy encantado de tener la oportunidad de estar aquí y visitar este colegio, que es único, está muy completo y muy bien hecho”.
Es importante que gobierno, sociedad y empresas volteen a ver a esta población, y que dirijan sus esfuerzos y busquen mejorar las oportunidades de salud, educación y vida laboral de personas con discapacidad.
Cada vez hay más ejemplos de niños, jóvenes y adultos con discapacidad que están haciendo cosas y proyectos memorables, como el caso de Isabella Springmül, la diseñadora de 19 años con una marca propia de ropa que hace homenaje al arte tradicional guatemalteco, o Ángela Bachiller, la primera concejal con síndrome de Down; ambas muestra de que basta de un poco de apoyo, constancia, oportunidades, pero principalmente eliminar todos los prejuicios sociales que existen alrededor de esta condición.
Las personas con discapacidad no son distintas a las demás, tienen los mismos deseos y las mismas necesidades, y si aún no nos crees, echa un vistazo al siguiente video de la campaña #NoSpecialNeeds, que nos invita a cambiar nuestras ideas y conceptos y aceptar que todos somos iguales.