El Vaticano, llamado oficialmente el Estado de la Ciudad del Vaticano, es uno de los lugares más importantes de Italia, porque además de albergar la Santa Sede —máxima institución de la Iglesia católica— está comprometido contra el cambio climático.
Para entender cómo es que este lugar lucha contra tal problemática, revisemos lo que afirma el Papa Francisco:
La irresponsabilidad de las generaciones pasadas y presentes no puede dañar el futuro de la familia humana, especialmente de sus miembros más vulnerables.
De hecho, los más vulnerables a los huracanes, las sequías, las inundaciones y otros fenómenos meteorológicos extremos, son los que sufren el peor impacto de esta crisis climática.
Papa Francisco.
El Vaticano contra el cambio climático
En 2019, Antonio Guterres —Secretario General de la ONU— afirmó en una visita al Vaticano que en tiempos difíciles todos los pueblos del mundo deben permanecer en paz y armonía.
El Vaticano se ha prestado a ello, por lo que el mandatario elogió al jefe de la Iglesia Católica Romana al considerarlo un mensajero de la humanidad, el cual ha pronunciado su apoyo en temas como la crisis de refugiados, la pobreza, la desigualdad y la emergencia climática.
Guterres llamó a los países a comprometerse con el objetivo de lograr la neutralidad de carbono para 2050. Los científicos dicen que es necesario para que el planeta sobreviva.
El Papa Francisco también subrayó la necesidad de una acción climática urgente, agradeciendo a aquellos que se esfuerzan por crear una sociedad más humana y justa, e instó a las personas de todo el mundo a escuchar a los jóvenes que presionan a otros por un mundo mejor.
El trabajo contra el cambio climático está presente
Para retomar estos compromisos, de manera reciente el asesor científico del Papa Francisco llamado Ottmar Edenhofer, afirmó para The Guardian que la pandemia generada por COVID-19, ha obligado a los líderes mundiales a enfrentar los riesgos de la crisis climática.
Aunado a esto y debido a esta emergencia sanitaria, los líderes internacionales son más conscientes de los riesgos que hay en el planeta, y aunque muchos de ellos van presentándose poco a poco, tienen el potencial de causar grandes daños. Mientras que en los países pobres, el impacto del cambio climático no es una posibilidad en el futuro, existe desde hoy.
Edenhofer es director del Instituto de Investigación Mercator para los Bienes Comunes Globales y el Cambio Climático en Berlín (MCC por sus siglas en alemán), y fue designado para brindar asesoramiento científico a la agencia del Vaticano que se centra en la justicia para los refugiados, los pobres y los apátridas (personas sin identidad nacional).
Además, su nombramiento sigue a la declaración de emergencia climática del Papa Francisco en 2019 en la que dijo que no actuar sería un acto brutal de injusticia hacia los pobres y las generaciones futuras, afirmando que los países ricos ahora tienen el deber moral de compensar a los países pobres que ya sufren los impactos sobre el cambio climático.
Las sequías pueden hacer que los conflictos latentes estallen violentamente, y las malas cosechas pueden hacer subir los precios de los alimentos. Desafortunadamente, si el planeta continúa calentándose, es probable que la migración y los conflictos aumenten aún más.
Ottmar Edenhofe, director del Instituto de Investigación Mercator para los Bienes Comunes Globales y el Cambio Climático en Berlín.
Para el experto es un gran honor y una enorme responsabilidad brindar asesoramiento científico sobre la cuestión del clima a la Santa Sede, un tema que se ha convertido en una cuestión de justicia para todas las personas.
¿Qué países van en contra del cambio climático?
Edenhofer también afirmó que fue imposible convencer a Donald Trump cuando era mandatario de los EE.UU., pero otros líderes como Joe Biden y de China, están convencidos. China es plenamente consciente de que sufrirá los impactos del cambio climático en el suministro de agua, lo que provocará enormes problemas.
El Papa y el Vaticano vs el cambio climático hacen el llamado por 1,300 millones de personas.
Entre esas personas, incluye a cristianos evangélicos, que hasta ahora tienen un gran problema para reconocer el cambio climático como un tema importante, ya que muchos de ellos ven esto como una postura de izquierda en Europa occidental, cuando no es una cuestión partidista, sino algo que es importante para todo el mundo.
La Iglesia católica representa a un pueblo socialmente conservador, pero es importante que pueda hablar con las personas. Y gracias al equipo de trabajo que tiene para ayudar a la lucha contra el cambio climático, podrá hacer un cambio de forma radical.
Entre los temas de discusión por los que trabajará el Vaticano se encuentran los siguientes:
- Reducir las emisiones tóxicas de los países más ricos (quienes son más responsables de las emisiones).
- Lograr la neutralización de carbono.
- Compensar a las personas de los países en desarrollo por los daños climáticos.
- Persuadir a Polonia para que firme el Acuerdo de París.
La justicia y la paz siempre han sido temas que vela la Iglesia católica. Ahora el cuidado de los bienes comunes mundiales, incluidas las leyes de biodiversidad, el cambio climático y la degradación de la tierra, son parte integral para el desarrollo humano.
