El que empresas e inversores aumentan compromisos de sostenibilidad tras pandemia, es una de las principales conclusiones de una reciente encuesta mundial encargada por el gigante bancario ING. La encuesta consta de 450 empresas encuestadas y 100 inversores institucionales, y examina las actitudes hacia la sostenibilidad a largo plazo y la gobernanza medioambiental y social (ASG).
Según edie la encuesta reveló que COVID-19 estaba actuando como un cisne blanco que había acelerado el compromiso de las empresas con la agenda verde. En total, el 57% de las empresas encuestadas confirmó su intención de acelerar nuevos planes de sostenibilidad, mientras que el 62% tenía previsto vincular la remuneración de los ejecutivos a objetivos medioambientales este año. En la actualidad, menos del 10% de las empresas encuestadas han vinculado la remuneración de los ejecutivos a los objetivos ASG.
La encuesta también reveló que los inversores están intensificando sus esfuerzos para examinar las carteras actuales contra los riesgos relacionados con el clima. De los inversores encuestados, el 74% ha incrementado sus compromisos para alinear las carteras con el Acuerdo de París, y el 72% está prestando más atención a la inversión ASG.
Impacto de los ASG: compromisos de sostenibilidad tras pandemia
Se espera que el aspecto social de los ASG aumente su importancia tanto en el ámbito empresarial como en el financiero. La salud y el bienestar de los empleados fueron señalados por el 33% de las empresas como la principal prioridad para el próximo año, por delante de la reducción de emisiones, con un 30%. Los inversores también han señalado la sostenibilidad social como una de sus principales prioridades, sólo por detrás del cambio climático y la resistencia de la cadena de suministro.
En los próximos 12 meses, el 80% de las empresas encuestadas espera que los gobiernos introduzcan nuevas políticas que les obliguen a centrarse en la mejora de los aspectos sociales de la cadena de valor, como el acceso a la sanidad.
Además, es probable que el 50% de las empresas introduzcan bonos sociales.
Otros resultados sugieren que muchas empresas ya han integrado la sostenibilidad en sus estrategias corporativas. Alrededor de tres cuartas partes de las empresas que han emitido nuevos bonos verdes afirman que ha mejorado la capacidad de las empresas para progresar con respecto a las estrategias, mientras que el 62% afirma que los ASG están muy integrados en los informes tradicionales. Además, el 66% afirma que el acceso a la financiación sostenible mejora la comprensión corporativa y la voluntad de adoptar nuevas prácticas sostenibles.
Sin embargo, en lo que respecta a la divulgación, ING señala que todavía hay que mejorar para garantizar que las empresas proporcionen la información más importante y relevante.
La pandemia ha demostrado que los individuos, las empresas, los inversores y los gobiernos pueden realizar rápidos cambios medioambientales y sociales para bien, pero es necesaria una mayor alineación para acelerar rápidamente el progreso en la lucha contra la crisis climática.
Nuestras acciones están bajo el microscopio como nunca antes y, como muestra el informe, la acción coordinada y la convergencia en áreas como las normas y la política ASG son esenciales para la rendición de cuentas y el cumplimiento de objetivos ambiciosos.
Gerald Walker, director general de ING en América
