Empresas, pilares contra la corrupción

Las firmas mexicanas deben asumir su responsabilidad en combatir la corrupción, dice Luis F. Ortiz; en 2010 se destinaron más de 32,000 millones de pesos en ‘mordidas’, según Transparencia Mexicana.

La corrupción en México es un gran problema para la sociedad y el Gobierno, mucho se habló en el sexenio pasado sobre su corresponsabilidad con las empresas, donde hoy se tiene un área de oportunidad para implementar nueva herramientas y lograr un ambiente ético e íntegro.

El costo de la corrupción en nuestro país se estima entre el 7% y 9% del PIB. ¿Cuántos hospitales, carreteras, agua y sectores o programas de asistencia social podríamos mejorar con una cantidad similar? Los números no mienten, la corrupción es un tema prioritario en México:

El Índice de Trasparencia y Buen Gobierno de Transparencia Mexicana, indicó que en 2010 se destinaron más de 32,000 millones de pesos en ‘mordidas’. En 2007 este costo fue de 27,000 millones de pesos.

El Foro Económico Mundial estimó que las empresas destinan entre 5% y 10% de sus ingresos para sobornos, un dato sin duda alarmante.

El Gobierno y los políticos mexicanos no pueden solos y necesitan del sector empresarial en la lucha contra la corrupción. De acuerdo con las encuestas del Barómetro de la Corrupción 2010 de Transparencia Internacional, los partidos políticos han sido catalogados como las organizaciones más corruptas, más que los policías y jueces; no podemos esperar a que esta tendencia se revierta, es indispensable que la empresa haga el cambio posible.

Hoy en día, la empresa mexicana es un elemento esencial en el crecimiento del país; así debe actuar y así se le debe percibir. A continuación se citan algunas herramientas que ayudarán a la empresa a mantenerse alejada de esquemas de corrupción:

1- Aplicación de la bioética, entendida como el estudio sistemático de la conducta humana en el ámbito de las ciencias de la vida y de la salud, analizando valores y principios morales. Una empresa bioéticamente responsable será aquella que basa sus decisiones en el respeto a estos valores.

2- Gestión del Riesgo. Atractiva herramienta que va más allá de la prevención en sí. Ayuda a conocer el impacto y la severidad de las consecuencias de producirse el siniestro (fraude, soborno, robo, simulación, etc.). Un método para ello podría ser el uso del ISO 31000.

3- Adopción de una política anticorrupción que inicie con un código de ética y siga con un código anticorrupción. Estos deberán adecuarse a la misión y objetivos de la corporación y deberán transmitirse en la organización.

4- Exigir a intermediarios, agentes, terceros y socios comerciales, que cumplan con los dos códigos.

5- Uso de la política KYC (Know Your Customer): conoce a tu cliente y a tu socio comercial en la medida de lo posible. La empresa buscará conocer todo lo posible sobre personas, clientes, proveedores e intermediarios. Para esto pedirá documentación que va desde la escritura constitutiva hasta el RFC, cuentas bancarias y referencias comerciales.

6- Benchmarking. Esta técnica usada en la administración de empresas sirve para comparar los métodos utilizados por otras empresas multinacionales para prevenir el soborno. Los estándares extranjeros (Estados Unidos y Reino Unido) son elevados pues así lo requieren sus leyes; vale la pena revisar el UK-BriberyAct 2010, así como la Guía de la Ley de Prácticas Corruptas en el Extranjero (FCPA).

7- Entrenamiento, monitoreo y revisión. Entrenar a empleados de la empresa y a terceros (intermediarios y agentes) constantemente en temas relacionados con ética, dilemas y caos prácticos son de gran utilidad. Igualmente sugerimos revisar periódicamente las políticas y monitorear su implementación.

El empresario mexicano tiene ahora valiosas herramientas en su poder que bajo una responsabilidad social deberá tomar en cuenta, difundir y aplicar. Como se puede apreciar, la corrupción en México presenta también áreas de crecimiento y de oportunidad para funcionarios públicos y empresarios. No hacer algo al respecto es el verdadero crimen pues la corrupción nos afecta a todos.

Fuente: CNN