El auto ya está dejando de tener valor para la gente, al menos en Alemania.
Este país, al que se ha admirado por su tradición automovilística, está diseñando nuevos conceptos que cambiarán su uso de forma radical.
El auto compartido, o «car sharing», como se lo conoce en el lenguaje popular, es el concepto al que están apostando grandes empresas como Daimler y BMW no sólo en las grandes ciudades alemanas como Berlín, Hamburgo o Munich, sino en pequeñas ciudades como Ulm y en otros países como Estados Unidos.
«Lo que hoy en día adquiere más valor es la libertad de poder vivir sin auto», señaló a REFORMA Gerd Lottsiepen, vocero del Club de Tránsito de Alemania.
Cada vez más, las grandes ciudades se «hacen más chicas» para los automovilistas. El auto se está volviendo obsoleto.
Es sobre todo en la población joven donde el auto ha dejado de funcionar como un símbolo de estatus.
La tendencia que han visto expertos e instituciones en Alemania es que la gente use transporte público o bicicleta, o bien, que rente un auto para hacer las grandes compras de supermercado o para un fin de semana a las afueras de la ciudad.
«El auto está ganando más espacio ahora como un medio de transporte público, ya sea en forma de taxi, de auto compartido o de auto en renta», señala Lottsiepen.
De acuerdo con la Asociación Alemana de Autos Compartidos, el número de usuarios de vehículos de ese tipo ha crecido.
Durante 2010 en Alemania la cifra aumentó 20 por ciento con respecto del año anterior, dando como resultado 190 mil usuarios.
«Los autos particulares sólo ocupan mucho espacio, además de que se quedan apagados unas 23 horas al día», dijo Weert Canzler, del Centro para la Investigación Social de Berlín.
Así, un auto compartido podría llegar a tomar el lugar de cuatro a ocho autos particulares.
Además, las flotas de este tipo de vehículos son de modelos más chicos y recientes, por lo que se contribuye también a la mejora del medio ambiente.
«Los autos de particulares no contribuyen tanto a la conservación ecológica porque la gente suele comprar modelos más grandes y de mayor consumo de combustible», señaló un reporte de la Asociación de Autos Compartidos.
La empresa BMW lanzó, en sociedad con la arrendadora Sixt , su modelo «Drive Now» que funcionará en Munich con 300 unidades, y en Berlín, con 500.
«Y en un futuro próximo habrá también autos eléctricos», confirmó un vocero de la empresa automotriz.
Los usuarios de estos vehículos ya no tendrán que preocuparse por encontrar un estacionamiento ni por las verificaciones o las llantas especiales para invierno. Además, las llaves serán innecesarias, pues los autos serán abiertos y encendidos con un chip que se colocará en la licencia de conducir.
A diferencia de otros modelos de autos compartidos, esta vez no habrá estaciones de entrega y devolución.
Los vehículos podrán reservarse por internet y se recogerán y dejarán en cualquier calle de la ciudad. También habrá una aplicación para los teléfonos de nuevas generaciones que permita hacer las reservaciones por ese medio.
Hasta el momento, sólo un concepto similar se ha puesto en marcha: «Car2go», de la competidora alemana Daimler.En 2008 dicho programa comenzó a funcionar con la arrendadora Europcar en las ciudades de Ulm, Alemania, y Texas, en Estados Unidos. Ahora también está en Hamburgo.
Otras empresas, como la alemana Volkswagen y la francesa Peugeot-Citroën, también están diseñando conceptos de auto compartido, algunos de los cuales ya se encuentran en fase de prueba.
En Alemania también la Deutsche Bahn, la empresa de ferrocarriles, tiene en funcionamiento ya su modelo.
En total, entre esta y otras pequeñas empresas, existen en el país unas 2 mil 400 estaciones de entrega y depósito de autos, y un parque vehicular de 5 mil autos compartidos que cada año crece en 10 por ciento.
Confort sobre ruedas
Car2go asegura dar amplios beneficios en la renta de autos compartidos. De acuerdo con la empresa, este tipo de vehículos se han vuelto muy populares entre los jóvenes y ejecutivos.
1.- El cliente acude a una de las oficinas a solicitar un auto. Previamente puede realizar una solicitud por internet y recoger el vehículo en una de las sucursales.
2.- La empresa proporciona una tarjeta con la que se activa el automóvil. El cliente no paga costo extra por gasolina o por salir de la ciudad.
3.- El usuario puede utilizar el auto dentro y fuera de Alemania por el tiempo que lo desee. El cargo se hará por minuto, horas o días, según convenga.
4.- El estacionamiento no es un problema, pues la empresa cuenta con varios puntos de estacionamiento en la ciudad y el país.
Fuente: Reforma, Internacional, p. 16.
Reportero: Yaotzin Botello.
Publicada: 18 de abril de 2011.