En 2020, nueve de cada diez adultos en México tendrá algún padecimiento serio relacionado con el sobrepeso
De no frenarse el sobrepeso y la obesidad entre la población mexicana, para 2020 nueve de cada diez adultos padecerá un problema del corazón, será diabético o desarrollará una enfermedad vascular cerebral.
El titular de la Secretaría de Salud (Ssa), José Ángel Córdova Villalobos, advirtió que si nuestro país no logra combatir el problema de sobrepeso, las enfermedades que en la actualidad manifiestan los adultos mayores las padecerán, dentro de una década, personas de 30 a 59 años.
Esto quiere decir, explicó el funcionario, que si adolescentes y adultos no mantienen un peso adecuado en el presente, para 2020 sólo uno de cada diez será una persona sana.
De acuerdo con estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) dentro de dos lustros el número de diabéticos en el mundo aumentará 50 por ciento, pero si en México siete de cada diez adultos sigue teniendo sobrepeso y obesidad se podría llegar a 90 por ciento de mexicanos con diabetes.
«Esto evidentemente implica un mayor número de enfermos con problemas crónicos, menor calidad de vida, disminución de la esperanza de vida y mayor costo», alertó Córdova Villalobos.
Esta advertencia la dio a conocer al dictar la conferencia magistral «Sobrepeso, obesidad y enfermedades crónicas en México, situación y perspectiva», en las instalaciones de la Universidad Atemajac, en León, Guanajuato.
POBLACIÓN ADULTA
De acuerdo con las proyecciones del Consejo Nacional de Población (Conapo) para 2020 habrá 46 millones 46 mil 695 adultos de 30 a 59 años de edad.
De tal modo que, de no frenarse la serie de problemas que implica la obesidad, alrededor de 41 millones 440 mil adultos en ese rango de edad padecerá una cardiopatía, será diabético o desarrollará un problema vascular del cerebro.
En la actualidad, alrededor de ocho millones de mexicanos son diabéticos y más de 25 millones tienen hipertensión, según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2006.
Para contrarrestar estas enfermedades ligadas al sobrepeso, el secretario de Salud señaló que si una persona aumenta más de diez kilos en un año, el riesgo de padecer diabetes aumenta seis veces, además de que causa degeneración del aparato músculo-esquelético.
Ante este alarmante problema de salud pública, el funcionario federal subrayó que el ejercicio físico no es suficiente, pues también se debe tomar en cuenta la densidad energética de los alimentos que ingerimos.
Puso como ejemplo que 100 gramos de manzana tienen 60 calorías, mientras que la misma cantidad de papas fritas tiene más de 500 calorías, y si una persona consume entre 20 o 30 calorías diarias más de las necesarias, después de un mes subirá uno o dos kilos.
Otra medida es la reducción del consumo de azúcares y grasas en bebidas saborizadas, ya que estas últimas se pegan con facilidad a las arterias y con el paso del tiempo causan problemas en el corazón.
No obstante, Córdova aclaró que la leche no debe dejar de consumirse, siempre y cuando sea descremada, porque es una fuente rica en calcio y zinc.
COMA FRUTAS Y VERDURAS
El titular de Salud puntualizó también que es necesario incrementar el consumo de verduras, frutas, cereales y fibra, así como reducir la ingesta de sal con el fin de evitar el riesgo de hipertensión arterial.
Recordó que los padres de familia deben poner atención en el lunch de sus hijos, porque un niño debe consumir mil 500 calorías en un día, pero en muchos casos, a la salida de la escuela, ya han consumido mil 250 calorías.
Fuente: Excélsior – nacional, p. 16
Autor: Lilian Hernández
Publicada: 1er de agosto 2010
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