Las ciudades de Curitiba (Brasil), Nagoya (Japón), Montreal y Edmonton (Canadá), Joondalup (Australia) y Bruselas (Bélgica) podrían convertirse en ejemplos de conservación de biodiversidad y promoción de espacios verdes dentro de sus territorios.
Informa Sci.Dev que éstas participarán de un Plan de Acción para ayudar a las ciudades a reducir la pérdida de biodiversidad. El mismo incluye acciones como la expansión de parques, corredores verdes, plantación de árboles e involucramiento de los ciudadanos con educación ambiental.
El plan fue aprobado en el marco de la Segunda Reunión de Curitiba sobre Ciudades y Biodiversidad, y será presentado en la Conferencia de las Partes sobre Diversidad Biológica de la ONU (COP10) que se llevará a cabo en Japón en octubre.
Los resultados de las acciones que se lleven a cabo en las ciudades mencionadas se medirían con un Indice de Biodiversidad Urbana elaborado también en la reunión, que evaluará temas como proporción del área verde en las ciudades y el presupuesto destinado a proyectos de biodiversidad.
¿Por qué es importante un plan de estas características? Simple: los espacios verdes en ciudades mejoran la calidad del aire, mitigan emisiones de carbono, promueven una mejor calidad de vida y hasta podrían promover el cultivo local de alimentos.
Pero el crecimiento de las urbes está provocando la pérdida de espacios verdes, por lo cual es importante promover un crecimiento de las ciudades que no atente contra la biodiversidad. Más aún considerando que hoy la mayor parte de la población mundial vive en áreas urbanas y que se espera que para 2050, dos tercios de los habitantes del globo residan en ciudades.
En el año internacional de la biodiversidad, que se celebra durante este 2010, es interesante que se promuevan acciones no sólo orientadas a conservar selvas y bosques, sino también a reverdecer las urbes.