Los planes de auditorias energéticas en las empresas, con el objetivo de reducir costes en su proceso productivo, aumentarán en cerca de un 20 por ciento durante el año 2012, según Ágora Kioto, motivadas por la crisis económica y la previsible subida de la factura de la tarifa eléctrica que tendrá lugar el próximo año.
El aumento se debe, según Ágora Kioto, entre otros factores, a que este tipo de actuaciones «permite lograr una mayor eficiencia energética de los inmuebles de las empresas al mismo tiempo que posibilita que incrementen su valor en el mercado inmobiliario y contribuye a mejorar sus acciones de Responsabilidad Social Corporativa».
En ese sentido, destaca que mediante la auditoría energética «es posible averiguar el potencial de ahorro energético de las instalaciones, conocer las recomendaciones para minimizar el consumo según la zona o usos clave de los edificios y saber cuáles son las soluciones técnicas más eficientes».
Las áreas en las que las compañías pueden conseguir un mayor ahorro dependerán «de la modalidad o tipo de instalaciones que empleen», pero señala que los campos en los que las empresas pueden hacer «recortes significativos del gasto son los consumos eléctricos, la iluminación y los sistemas de refrigeración y climatización».
Así, Ágora Kioto considera «recomendable» que los edificios dispongan de sistemas de control que permita ajustar el consumo eléctrico a la ocupación real de los inmuebles, evitando consumos innecesarios o desorbitados optando, en la medida de los posible, por equipos electrónicos y/o eléctricos que aseguren la mayor eficiencia energética posible.
En cuanto a la iluminación, recomienda «sacar el máximo partido a la luz natural» y optar por el uso de lámparas de alta eficiencia como las LED o por interruptores de presencia, en el caso de luz artificial. Para el aire acondicionado recuerda que «se recomienda mantener una temperatura constante que nunca debería descender de los 26º en verano».
Por último, la consultora aconseja en lo relativo a la climatización que «el edificio cuente con un adecuado aislamiento térmico que permita un aprovechamiento eficaz de la ganancia de calor por radiación solar directa a través de las ventanas o de los sistemas de calefacción, evitando fugas».
Fuente: Europapress.es
Publicada: 15 de diciembre de 2011.