En Petróleos Mexicanos (PEMEX) hay todavía cinco mil empleados que perciben salarios sin trabajar, pues están adscritos a áreas, plantas o instalaciones cerradas o limitadas para operar.
El consejero profesional de la paraestatal, Fortunato Álvarez, señaló que hace cuatro años había 11 mil empleados sin materia de trabajo, pero luego de un proceso de negociación con el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) se transfirió al personal a otras áreas.
Trabajadores adscritos a los complejos petroquímicos de Camargo y Pajaritos, donde el cierre total y parcial de operaciones ha provocado que los empleados sólo chequen tarjeta de asistencia y cobren, sin ejercer actividad alguna.
Por años, con el cierre parcial o total de plantas petroquímicas el personal se fue quedando sin materia de trabajo, pero el organismo sindical se oponía a que realizaran otras tareas o a su transferencia a otras instalaciones, porque no lo consideraba el contrato colectivo de trabajo.
El funcionario precisó que en los últimos dos años se han incorporado alrededor de tres mil trabajadores a nuevas áreas y garantizó que ese proceso de reubicación del personal continuará por acuerdo con el sindicato.
Jubilación
Además, Ruiz Alarcón dio a conocer que en los próximos diez años se jubilarán alrededor de diez mil técnicos y especialistas petroleros, por lo que la compañía lleva a cabo un programa interno de capacitación de personal calificado que permita afrontar ese problema y restituir al personal.
Urgió a atender el envejecimiento y la declinante tasa de restitución del personal especializado que extingue la solvencia técnica y gerencial del organismo, además de contener el pasivo laboral mediante la modificación de la Ley Federal de Derechos.
También es necesario, agregó, establecer una visión tecnológica de mediano y largo plazos en donde se identifiquen las áreas estratégicas que Pemex debe desarrollar para enfocar los recursos y formar redes nacionales con los centros de investigación nacional y el Instituto Mexicano del Petróleo.
Por otra parte, los consejeros de PEMEX, salvo Rogelio Gasca Neri, quien no asistió a la conferencia de prensa, difirieron sobre la iniciativa para permitir que compañías privadas participen en refinación y petroquímica básica, aunque coincidieron en que para resolver el déficit de combustibles en el país, la petrolera podría adquirir refinerías en el extranjero. El PAN en el Senado presentó una iniciativa de reforma hace unos días en busca de apertura.
Fortunato Álvarez y Héctor Moreira coincidieron en que el capital privado de manera independiente o mediante alianzas con Pemex pueda invertir en plantas de refinación y petroquímica básica para reducir las importaciones de gasolina, especialmente.
Ruiz Alarcón se pronunció por cambiar el régimen fiscal de la petrolera, pues permitir el capital privado «sería una claudicación».
Los funcionarios dieron a conocer su informe de trabajo a dos años de asumir sus cargos. Hasta el pasado 17 de marzo hubo 370 reuniones de trabajo del consejo de administración de Pemex y sus comités, pero falta completar la implantación de la reforma energética aprobada en 2008.
Ruiz aceptó que PEMEX observará cambios tangibles en 2013, cinco años después de la reforma energética, porque la industria es de mediano y largo plazos.
Fuente: El Financiero, Negocios, p. 23.
Reportero: Esther Arzate.
Publicada: 30 de marzo de 2011.
