Para celebrar 50 años de su fundación, la farmacéutica mexicana Laboratorios Kener dijo que impulsará un programa de becas que apoyará económicamente a aquellos profesionales de la salud que deseen estudiar una especialidad. El objetivo es llegar a médicos generales con los mejores resultados académicos que por falta de recursos no tienen la posibilidad de obtener una especialización.
Además, para reconocer a los profesionales mexicanos que desarrollan investigaciones médicas de alto nivel, la farmacéutica otorgó el Reconocimiento Kener. Al respecto, Luis H. Soní, director general de Laboratorios Kener, compartió, en entrevista, el desarrollo de este laboratorio especializado en genéricos intercambiables, el primero en México en obtener el Certificado por Buenas Prácticas de Manufactura bajo los actuales lineamientos requeridos por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).
¿En qué se especializa Kener?
Tenemos una gama amplia de medicamentos y formas farmacéuticas, en ello hemos trabajado consistentemente para tener una amplia gama que atienda los distintos padecimientos de la población desde cardiovasculares y antidepresivos, pasando por la gama de analgésicos, antibióticos, gastrointestinales, antimicóticos, y recientemente nos hemos enfocado en todo lo que tiene que ver con el síndrome metabólico como es la hipertensión, diabetes, enfermedades crónico-degenerativas que es hacia donde está migrando la población mexicana.
¿Dónde pueden encontrar sus medicamentos los pacientes?
No sólo estamos en farmacias de genéricos, también en todas las cadenas importantes y en supermercados.
¿El paciente confía en los genéricos?
Desgraciadamente en México se dio el tema de los similares que distorsionaron mucho el mercado y han creado confusión. Hasta febrero de este año teníamos los similares, los genéricos, los genéricos intercambiables y los de patente. Los similares, como su nombre lo dice, eran parecidos pero no iguales; los genéricos eran productos cuya patente había vencido y se había hecho una formulación con base en el ingrediente activo, pero sin los estudios para demostrar que se comportaban igual que el medicamento de patente; y los genéricos intercambiables son los que sí habían hecho estudios de bioequivalencia y biodisponibilidad.
¿Cómo está compuesto el mercado de los medicamentos?
En 2005 se hizo una modificación en la ley, dieron un periodo de cinco años que venció en febrero, desde entonces en México lo único que existe son medicamentos de patente y genéricos intercambiables que han demostrado un comportamiento idéntico a los de patente.
¿Cómo promueven el uso de genéricos?
A nivel de usuario se han generado muchas dudas y es en lo que estamos trabajando, para que esté mejor informado y tenga los elementos para tomar una mejor decisión, por ello estamos trabajando tanto a nivel de los consumidores como de los médicos, porque la mayoría de los medicamentos que vendemos son de prescripción y el adecuado para recomendarlos es el médico, así que parte de nuestro trabajo es presentarles nuestros productos y estudios para demostrarles que tienen la misma efectividad que los de patente pero son mejores en cuanto a costo.
¿Por qué recomienda los genéricos intercambiables?
Son seguros, tienen una investigación y respaldo, son eficaces y accesibles, además desgraciadamente por la situación económica que atraviesa el país hay mucha gente que tiene que suspender sus tratamientos porque no le alcanza para pagar todos los medicamentos que le están surtiendo en una receta, pero hemos encontrado que cuando al paciente se le da una mejor educación y al médico mayores elementos de información se obtiene una mejor decisión y mejores resultados porque finalmente lo que importa es que la gente tenga una buena calidad de vida y mejore su salud.
¿En qué porcentaje son más baratos los genéricos contra los de patente?
Depende de cada medicamento y de la competencia que exista. Normalmente cuando un producto es de patente tiene precios que podríamos considerar muy elevados porque tienen que pagar la investigación, que tarda entre ocho y diez años, y cuesta varios cientos de millones de dólares, antes de salir al mercado a estos medicamentos se les otorga una patente de 20 años de duración, después de eso ya podemos participar los medicamentos genéricos que lo que hacemos es todo un trabajo para utilizar el ingrediente activo en una forma farmacéutica especifica y poderlo ofrecer como medicamento con autorización, porque no puedo vender un producto si no tuvo un desarrollo de al menos año y medio, y tengo que someterlo a la Cofepris para que me dé la autorización para producirlo y venderlo, así que los consumidores deben estar seguros que cuando llega un producto ya pasó por un proceso serio.
¿Han encontrado trabas de los laboratorios de patente?
Cada quien está buscando su negocio y hace sus estrategias, a veces los laboratorios dueños de las patentes tratan de alargarlas por distintos mecanismos como mandato judicial o reformulaciones, además llevan el mensaje de que son originales y trabajan bastante en conservar la fidelidad de los médicos y los clientes, pero también ha cambiado el mercado porque antes estaban muy separados los medicamentos de patente de los genéricos, pero desde hace varios años, muchos de los laboratorios de patente tienen también sus laboratorios de genéricos porque cada vez se vuelve más costoso y tardado el desarrollo de una nueva molécula, así que también están compitiendo en ese mercado.
¿Cuál es su opinión respecto a la obligatoriedad de presentar receta médica para adquirir antibióticos?
En el país sí teníamos un nivel de automedicación muy alto que no es recomendable, así que había que migrar hacia un mejor sistema, independientemente de las molestias que pueda causar son cosas que van a ayudar a tener un mejor sistema de salud, el paciente tiene que acudir a su médico, que es la persona adecuada para recetar una prescripción y decirle qué medicamento es el que necesita, en qué forma y por cuánto tiempo, porque si nosotros mismos tomamos decisiones no vamos a tener los resultados, una salud informada es una mejor salud.
¿Cómo ha reaccionado el mercado por la entrada en vigor de esta norma?
Estamos en un periodo de ajuste, hay que hacer una serie de cambios a nivel de farmacias, operaciones, interacción con los canales de distribución, hay todavía muchos detalles que debemos pulir dentro de ese mecanismo, como controlar que las recetas sean auténticas, que haya un censo de médicos que se pueda usar como base, además de resolver qué va a pasar cuando alguien llegue a una farmacia y no exista el medicamento por falta de surtido, hay detalles que arreglar para que funcione mejor, en Estados Unidos, por ejemplo, no se puede ni comprar una jeringa sin receta.
¿Qué opina de que derechohabientes del IMSS recibirían gratuitamente sus medicinas si el hospital no las tiene?
Es una buena alternativa para darle al paciente los recursos necesarios para mejorar su salud, porque desgraciadamente lo que sucede es que le dicen que no hay el medicamento y si se quieren curar deben comprarlo afuera, pero con esta opción ya no será así; el punto es cómo instrumentar eso porque a nivel país hay muchas iniciativas, algunas de ellas muy buenas, pero hay que ver cómo hacerlas realidad, preguntarse qué va a implicar el que la receta se cambie en una farmacia, la tramitología, etcétera.
¿Planean hacer desarrollo de medicamentos de patente?
Aunque somos de genéricos tenemos un laboratorio de investigación y desarrollo muy fuerte donde desde hace varios años hemos trabajado en investigaciones con medicamentos genéricos, pero también lo haremos en nuevas formas farmacéuticas o nuevas formas de entrega porque actualmente las más comunes son las pastillas, inyecciones y jarabes, pero ya se habla de parches que puede dosificar el medicamento, los liposomas que encapsulan el ingrediente activo y lo liberan de acuerdo a ciertas condiciones o las combinaciones para que en lugar de que te receten tres medicamentos en una sola pastilla se tenga la fórmula.
¿Por qué deciden lanzar las becas de apoyo para especialización?
Queremos ayudar a los médicos porque vemos que hay muchos que por restricciones económicas y de tiempo no pueden hacer una especialidad, así que estamos trabajando con un comité para elegir el plan a seguir; en principio nos vamos a orientar hacia los padecimientos que existen en el país, por ejemplo gente que quiere estudiar geriatría porque somos una población que está envejeciendo y necesitamos médicos adecuados.
Fuente: El Universal, Cartera, p. B6.
Reportero: Adriana Cruz.
Publicada: 7 de enero de 2011.
