En México se comercializan 256 marcas de cigarros ilegales, según la lista actualizada de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) emitida el pasado 25 de septiembre.
La información encendió los «focos rojos» de la industria tabacalera, que exige a las autoridades mayores controles.
En agosto de 2014, la Cofepris había reportado que al País ingresaban por contrabando 207 marcas.
Hasta la fecha, el organismo ha logrado el aseguramiento de más de 206 millones de unidades, lo cual representa un crecimiento del 515 mil por ciento comparado con 2010.
Algunas de las marcas ilegales que se adicionaron a la lista son After Hours, Caesar Park, Casino Royale, Fama, Park Slims, Royals Maiwand y Trotter, entre otras.
En la alerta, Cofepris señala que puede tratarse de producto falsificado, adulterado o incluso elaborados con ingredientes desconocidos.
En los últimos 5 años, la industria tabacalera ha sufrido una importante caída en el volumen de comercialización, ya que estima un total de 6 mil millones de cigarrillos ilegales que se introducen cada año al País.
«Hemos detectado que actualmente a nivel nacional, uno de cada tres puntos de venta manejan marcas ilegales, e incluso en algunas partes del norte y centro del País se ha identificado que dos de cada tres puntos de venta comercializan marcas ilícitas.
«La diferencia de precios entre marcas legales e ilegales no sólo afecta a la industria, sino también a todo el sector productivo; al consumidor, porque fuma un producto de dudosa procedencia y calidad, y al Gobierno mexicano, por tratarse de cigarros que evaden físicamente más de 5 mil millones de pesos al año», señaló Gastón Zambrano, director de Legal y Asuntos Corporativos de British American Tobacco México (BAT).
Por ello, demandó reforzar las acciones contra el ingreso de cigarros ilegales, con penas mucho más fuertes para los infractores, con vigilancia constante en aduanas, carreteras y comercios, y con la destrucción del producto.
Zambrano exigió trabajar de manera coordinada para poder generar un mayor impacto atacando todos los frentes y asegurar que el cigarro ilegal no regrese al mercado nacional.
Los mexicanos incrementaron su gasto anual en tabaco y bebidas alcohólicas ilegales en 187 por ciento, pues pasó en 2010 de un total de 696 millones de pesos a 2 mil millones en 2014, según la Cámara Americana de Comercio (AmCham).
Fuente: Reforma