Tener contacto con la naturaleza es algo que la humanidad necesita, incluso en las urbes más pobladas se procuran espacios públicos con vegetación. Por ello, no es casual que existan actividades como el campismo, natación, buceo o cualquier otra actividad que pueda mantener cerca a los seres humanos de algunos hábitats.
Esta convivencia continua entre la naturaleza y la humanidad casi siempre supone un riesgo para la primera; sin embargo, en ocasiones la humanidad también se ve perjudicada. Recientemente, un tiburón blanco atacó y mato a un hombre, ante este hecho se está buscando matar a la especie agresora. ¿Es ético?
Un ataque de tiburón le costó la vida a Simon Nellist
Simon Nellist fue un ex soldado y nadador británico de 35 años de edad. Uno de sus pasatiempos favoritos era nadar en el mar porque amaba y respetaba profundamente la naturaleza.
Sin embargo, un incidente le arrebató la vida el 16 de febrero de 2022. De acuerdo con PlayGround, todo sucedió cuando un tiburón blanco atacó a Nellist en la playa de Little Bay, sur de Sídney. El joven entrenaba para un nado benéfico de Malabar Magic Ocean Swim que se llevaría a cabo el domingo siguiente, y el cual fue suspendido.
El comité organizador extiende nuestros pensamientos y oraciones a la familia del nadador que fue atacado tan trágicamente ayer.
Por respeto al nadador y su familia, y luego de una amplia consulta con el Consejo de Randwick y el experimentado personal de Surf Life Saving, creemos que cancelar el nado de 2022 es apropiado.
Robert Lloyd, director de eventos de Malabar Magic Ocean Swim.
Por si fuera poco, Nellist estaba preparando su casamiento junto a su pareja Jenny Ho, la boda se llevaría a cabo en las próximas semanas. Este trágico accidente es el primer ataque de tiburón en esta zona en más de 60 años.
Cuando sucedió el ataque, un pescador fue testigo del mismo y ocurrió ante su mirada atónita y gritos de auxilio. Él vio cómo el tiburón blanco arrastraba por varios metros el cuerpo de Nellist.
Luego del ataque, las autoridades han realizado un operativo para matar a un tiburón blanco, el que agredió a Nellist, bajo el argumento de posibles ataques futuros. Empero, las respuestas en contra se han hecho escuchar:
Es muy inusual ver a un tiburón atacar a un humano de esa manera. Normalmente una mordedura no es fatal, muerden algo para averiguar qué es.
Una vez que se dan cuenta de que es una persona y no una presa normal, se despegan. La gran mayoría de las mordeduras de tiburón ocurren de una sola vez. Esta es una situación muy singular y, lamentablemente, trágica.
Lawrence Chlebeck, del grupo Humane Society International
La familia de Nellist, en especial su tía Jackie Seager, ha declarado que su familia se encuentra devastada con el incidente, mientras la prometida de Nellist está hecha pedazos, al igual que sus padres, pese a ello, Seager afirma:
No creo que Simon quisiera que mataran al tiburón. Amaba la naturaleza. Él nadó con tiburones antes. No era la primera vez que los veía y que nadaba con ellos. No creo que él alguna vez pensara que lo iban a lastimar.
Jackie Seager, tía de Simon Nellist.
Este desafortunado accidente abre el debate sobre los límites de la naturaleza, pero también de la humanidad al intentar matar a un tiburón para «prevenir» una situación similar.
¿Es ético matar a un tiburón?
Como se mencionaba al inicio, la relación entre la humanidad y la naturaleza es constante, en especial en las últimas décadas cuando el tema del calentamiento global es latente y las acciones para mitigarlo urgentes.
Tal situación ha obligado a diversas especies a salir de sus hogares y estar más cerca de las actividades humanas, lo cual representa un peligro tanto para los animales como para la humanidad.
El caso de Nellist resalta este elemento, ya que él se encontraba nadando en mar abierto —hogar de diferentes especies marinas— lo que supone un contacto directo con la naturaleza, pero también una exposición a sus peligros como fue el caso.
La respuesta de las autoridades australianas parece caer en un pánico relativamente fundado que a la realidad. Es un hecho que la noticia es alarmante, pero hasta el momento no existe evidencia de constantes ataques de tiburones contra los seres humanos.
En búsqueda de una explicación, especialistas coinciden en que:
Posiblemente el tiburón atacó al hombre porque lo confundió con una foca a raíz del traje de neopreno que el hombre llevaba puesto y que es inusual entre bañistas a raíz de que el agua es cálida.
Especialistas.
Por lo que es probable que aniquilar a un animal que actuó por instinto pueda resultar poco ético, por lo que si bien es imprescindible procurar el bienestar de quienes acuden al sitio de los hechos, matar a un tiburón por atacar bajo sus propios impulsos y sin más argumentos podría encontrarse fuera de los criterios éticos.
Por otra parte, es de interés cuestionarse es que son los seres humanos quienes estamos transgrediendo los espacios naturales de forma más agresiva, no específicamente en el caso de Nellist, pero sí al momento de invadir hábitats naturales indebidos o no tomar acciones para mitigar el calentamiento global, acciones que le han arrebatado el hogar de cantidad de animales y llevado a la extinción a otras.
