Por: Antonio Tamayo
Si bien muchos propugnamos considerar la Responsabilidad Social ya sea en el aspecto individual y como un modelo de gestión empresarial, es necesario considerar también la responsabilidad ecológica que todos tenemos por el sencillo hecho de habitar en este planeta.
Y esa responsabilidad ecológica se refiere específicamente a la sustentabilidad.
En la búsqueda básica de la supervivencia económica, o en el afán de incrementar la riqueza que ya se tiene, se olvida o peor aún se desdeña el considerar que habitamos un planeta único y que cada día se encuentra más contaminado y que se extraen sus recursos en una forma que afecta su medio ambiente y con ello el hábitat de animales y plantas que ahí se encuentran.
Estoy cierto que mucho se ha escrito y hablado de este tema en múltiples idiomas en al menos la última década; sin embargo todo ello parece poco ante la enorme cantidad de evidencia que existe a escala mundial de los abusos que se comenten al planeta que no se queja de manera evidente.
Parece increíble que a pesar de dichas evidencias desde el punto de vista científico de todos los problemas que ya existen como el cambio climático, o los que potencialmente se presentarán en un futuro próximo, siga persistiendo la mentalidad religiosa de que el ser humano es el “rey de la creación”, y por ello tiene el derecho de modificar el entorno ecológico a su conveniencia y principalmente por su afán de codicia de incrementar su riqueza monetaria.
Por lo anterior, creo que hay un punto en común entre la responsabilidad social y la ecología. En la primera se busca generar una conciencia en cada persona de la existencia “del otro”, y por ello crearse un comportamiento ético, tanto a nivel personal como empresarial; terminar con el pensamiento individualista y exacerbado en el que se ha vivido al menos en los pasados cien años.
Y en la parte ecológica sucede lo mismo, no existe una conciencia de “ese otro” que son los animales, plantas y todos los recursos naturales que forman en conjunto el ambiente adecuado para la creación y generación de la vida en todas sus manifestaciones.
Y tanto en la responsabilidad social como en el plano ecológico, se olvida que todos necesitamos “del otro”, para sobrevivir y realizarse como persona, ya sea en la escuela o en el trabajo; y de los proveedores y clientes como empresa. Y en la parte ecológica se necesita de “ese otro”, para tener los alimentos y recursos para sobrevivir, ya sea primordialmente el agua, un clima benigno, los metales y todos los subproductos que se utilizan para ser más confortable nuestra vida.
En la cotidianeidad no reparamos ni tomamos conciencia de todos esos otros, personas y empresas, que contribuyeron y contribuyen en todos lo que utilizamos, ya sea ropa, computadoras, energía y medios de comunicación y transporte por mencionarlo en forma muy generalizada.
Ni tampoco en todos los recursos naturales que se utilizan para que podamos alimentarlos o bien, para tener una vida más cómoda en el más amplio de los sentidos. Se dice que por el consumo actual se requerirá el equivalente de más planetas en el mediano plazo, los cuales no los tenemos.
Considero que en la medida que tomemos una mayor conciencia social y se utilicen los recursos naturales en una forma más responsable, nuestra vida será más placentera y el planeta podrá ser más sustentable.
Seguiremos platicando …
Blog: http://atamayon.blogspot.com
Seguiremos platicando…
Antonio Rey Tamayo Neyra
Dedicado al periodismo de investigación desde 1987 especializado en temas socioeconómicos. Desde 1991 colabora en el periódico El Financiero como Coordinador Editorial y Redactor de Proyectos Especiales, además de colaborar en otros medios. Desde el 2002 involucrado en la Responsabilidad Social, escribiendo y realizando proyectos editoriales de este tema, y además documentando las actividades de las empresas (tipo caso)
También es profesor de posgrado e imparte capacitación en relacionales laborales.
Licenciado en Administración por el Instituto Tecnológico Autónomo de México; su preparación profesional posterior incluye un Diplomado en Responsabilidad Social en el Tecnológico de Monterrey, y un Curso del mismo tema en la Universidad Abierta de Cataluña. Actualmente estudia la Maestría en Sociedad de la Información y el Conocimiento en la Universidad Abierta de Cataluña.